vitoria. Afincado en Gasteiz, aunque natural de Barcelona, el guitarrista Raül Vera, pese a su juventud, es uno de los veteranos de la programación alternativa que se vive durante la semana jazzística en Vitoria. Vera desgrana para DNA motivaciones y particularidades de este ajetreado periplo.

Llevo escuchándole desde hace algunos años en multitud de bandas, pero dígame una cosa, ¿cuántos años lleva en Gasteiz Raül Vera?

Llegué a Vitoria hará ocho o nueve años por motivos personales. A menudo la gente piensa que ha sido por la música y me preguntan: "¿Siendo de Barcelona qué coño haces en Vitoria?".

Conozco un músico vitoriano que estudió en Barcelona y le reprochaban lo contrario. Supongo que Gasteiz y Euskadi tienen un cartel jazzístico por sus festivales un tanto irreal.

Es cierto. El festival de jazz es muy vistoso, pero luego durante el año… También hay que estar en el circuito de jazz de Barcelona donde la gente es buenísima y es muy difícil hacerte un hueco allí.

Además ciudades como Madrid o Barcelona atraen mucha gente de fuera. Aquí el circuito local es local, salvo algunas excepciones como usted.

Exacto. En Barcelona, que es lo que yo conozco, hay gente como Peter Bernstein, músicos buenísimos. Aunque por lo que tengo entendido, si te quieres dedicar a la música sí que hay que pasar por Madrid.

Ha abandonado ya la hiperactividad a la que se sometía. Me refiero a que hasta hace nada, usted tocaba en Blue Noise, Kebab, Minoriy Proof…. Ahora mismo sólo lo hace con Bitter Biscuits y Raül Vera Group.

Me he querido centrar sólo en Raül Vera Group, además de Bitter Biscuits, porque prefiero hacer una cosa y bien que muchas y menos bien. Ahora estoy centrado en este grupo. Son canciones que he hecho yo con muchas ganas, mucha ilusión y es lo que me ocupa la mayoría del tiempo ahora. Además estoy contento porque están saliendo muchas actuaciones sin ninguna carta de presentación. Nos han visto tocar y nos han llamado.

Creo que hay un disco de Raül Vera Group en el horizonte.

Será instrumental. Un disco destinado a guitarristas, muy guitarrero. También para la gente que escucha desde Scott Henderson, Allan Holdsworth o Mike Stern. Por ahí lo he querido llevar más o menos.

Usted ha teloneado a un referente de la guitarra como Joe Satriani y ha compartido escenario con otro como Guthrie Govan. En ese sentido, ¿cómo se gestaron ambos bolos?

Lo de Satriani, se gestó a través de Blas Fernández un batería que toca conmigo y que imparte clases en Mr. Jam (Bilbao). Fue una pasada, me quedé impresionado.

¿Y Guthrie Govan? Hay colgado en Internet una suerte de batalla de guitarristas entre ustedes dos impresionante.

Bueno, me dieron por todos lados (risas). Esto fue igual. Nos vieron teloneando a Satriani los que organizaban el concierto de Govan y nos pidieron tocar con él. Yo le conocía desde hacía no mucho pero me había impresionado.

¿Qué veremos hoy con Bitter Biscuits -una banda que toca éxitos de los Beattles en clave de jazz- en Erdizka y Siete (21.30 y 00.00 horas)?

Un día nos juntamos algunos músicos de Gasteiz por Facebook sin ánimo de hacer nada en serio, pero salió bien. Propusimos hacer una serie de versiones de los Beattles en clave de jazz, funk… Y la verdad es que es algo que me encanta, lo pasamos genial. Además, siempre he sido un guitarrista muy tímido, de quedarme en mi guitarra y abstraerme de lo demás, y esto me está viniendo muy bien porque somos más picarones, hablamos con el público, nos ponemos a cantar…

¿Puede adelantarnos usted alguno de los temas que interpretan?

Come together, Ticket to ride, Michelle… Hemos intentado evitar los temas más conocidos.

¿Como 'Yellow Submarine'?

Eso es (risas). Aunque al final lo tendremos que tocar porque no hacen más que pedírnoslo. A raíz de esto los estoy redescubriendo y me encantan.

No es usted un novato en las actuaciones que complementan el Festival de Jazz de Vitoria-Gasteiz. ¿Qué opinión tiene de las bandas que pueden verse de manera gratuita por la ciudad y del ambiente en general a lo largo de esta semana?

Me gusta mucho esta semana, para mí son las fiestas de Vitoria. Incluso, conozco a mucha gente que se coge vacaciones. Aunque creo que últimamente está bajando un poco el cartel no oficial. En todo caso, para mí es la mejor semana de Vitoria.