Santander. La ministra de Sanidad y Política Social, Leire Pajín, aclaró ayer que el fin de semana que visitó junto a sus padres la residencia del Lazareto de Mahón (Menorca), reservada para funcionarios, había "muchas plazas libres" y "pagó la tarifa" por usarlo, igual que hacen "todos los altos cargos del ministerio". Añadió que "no es la primera ni la última ministra" que visita esta residencia de Menorca, pero sí la primera que ha firmado un convenio para permitir también que los ciudadanos de esa isla puedan "usar y disfrutar" ese "enclave histórico que cuida y mantiene el Ministerio". La portavoz del grupo popular en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, aseguró que la ministra debe explicar "en qué condiciones" ha hecho uso de esta residencia para funcionarios. Según apuntó, la titular de Sanidad tiene que aclarar "si tenía derecho" a utilizarla y "bajo qué régimen". "Lo que queremos saber es quién tiene acceso a la residencia, qué condiciones ha de tener y si ha cumplido o se ha saltado alguno de esos requisitos para poder acceder a ella", concluyó. Sanidad negó cualquier privilegio en el uso por parte de la ministra de dos habitaciones -una para ella y otra para sus padres- y aseguró que no existía lista de espera.
La ministra se refirió también a las fotografías de ella publicadas en bikini en una playa de Menorca. "Seguramente hay quien piensa que los ministros debemos veranear en una urbanización de lujo exclusiva o en un resort con mucha seguridad para que nadie se nos pueda acercar y no puedan hacernos fotos en una playa normal, pero no lo he hecho nunca y no lo voy a hacer", enfatizó.