Nueva York. El diseñador británico John Galliano ha sido despedido de la compañía que lleva su propio nombre, después de que así lo decidiera el Consejo de Administración de la firma, controlado al 91% por Christian Dior, según aseguró ayer la revista estadounidense Women's Wear Daily (WWD).
La salida de Galliano de su propia firma sucede un mes y medio después de que fuera despedido como director artístico de Dior al día siguiente de que The Sun difundiera un vídeo en el que, aparentemente ebrio, decía "adorar a Hitler" y elogiaba sus prácticas nazis más atroces. El 24 de febrero una pareja ya le había denunciado por insultos antisemitas y racistas en la terraza del bar La Perle, en el barrio parisiense del Marais. A esta primera denuncia se unió pronto otra de una mujer que dijo haber sido agredida de manera similar en octubre. La dirección del grupo LVMH, que controla Dior, decidió romper sus relaciones laborales con él, aunque cuando se comprometió a buscar ayuda y pidió disculpas, le mantuvo contratado por su propia marca.
Ahora Galliano, de 50 años y que aún tiene pendiente una causa con la Justicia por injurias racistas que podría suponerle seis meses de prisión o una multa de más de 30.000 dólares, ha sido retirado definitivamente de la firma que lleva su propio nombre. Sobre el futuro de la firma John Galliano sin el modisto que le da nombre, WWD asegura que los propietarios han recibido diversas ofertas de potenciales interesados en comprarla procedentes de Italia, China y Oriente Medio, aunque no consideran que vender la empresa sea una prioridad.
Galliano fue destituido como director artístico de Dior cuando faltaban sólo unos días para que la semana de colecciones de París y dentro de ella los dos desfiles Prét-à-Porter de Galliano para el grupo LVMH, el de Dior y el de la marca que lleva su nombre. El modisto negó las acusaciones y denunció por difamación a sus demandantes, pero The Sun colgó el vídeo que le valió su despido instantáneo.