Barcelona
. La Fundación Foto Colectania muestra desde ayer y hasta el 4 de junio las 85 imágenes de la serie Women are Beautiful del fotógrafo norteamericano Garry Winogrand, uno de los grandes renovadores del siglo XX, y que con su cámara captó la transformación social femenina de los años 60 y 70.
Mujeres bañándose y tomando el sol en una piscina, otras dentro de un ascensor, en una cafetería, de fiesta o por las calles de las grandes ciudades de América, fumando y sin esconder que han dejado el sujetador en casa se reflejan en los retratos de Winogrand (Nueva York, 1928-1984), conocido como el príncipe de las calles por su afición a clavar su mirada en lo que en ellas acontecía. En este sentido, no se perdió la primera manifestación proaborto en EEUU y no tuvo empacho en contraponer la figura de la mujer con la de las multitudes, huyendo de los posados o del retrato en estudio. Las imágenes que acoge Barcelona, procedentes de la colección de Lola Garrido, fueron tomadas entre 1960 y 1975 y reunidas en un libro del mismo título -que no tuvo éxito en su momento- por el director del departamento de fotografía del MoMA, John Szarkowski. Garrido adquirió las fotografías en una subasta en San Francisco en 1990, no sin esfuerzo, y porque siempre le gustó "lo difícil". A su juicio, Winogrand -cuyo hijo Ethan, músico que reside en España, estuvo ayer en Foto Colectania- captó como nadie la transformación de la mujer a partir de los años 60 y cómo se desinhibía y empezaba a salir a las calles, "sin corsés, sobre todo mentales y domésticas". "Estas serían unas fotos post Mad men", apostilló en referencia a la aclamada serie de televisión. En su opinión, el artista estadounidense, combinando la espontaneidad con una aparente confusión, presenta en cada una de sus imágenes "una historia rodeada de otras varias historias".