Vitoria. La crisis empezaba a galopar con fuerza según iba pasando 2007, aunque algunos, por entonces, no pensaban que su carrera fuera a durar tanto y a ser tan dura. Pero a Panta Rhei le sirvió como punto de inspiración para dar fondo y forma, con ayuda llegada desde Estocolmo, a Corre, payasa, corre o, en su versión en euskera, Tira! Aurrera!. El espectáculo sigue vivo años después y, de hecho, piensa en un futuro cercano que incluso incluye gira al otro lado del Atlántico. Buenas noticias para una producción que, por motivos de salud, ha estado en barbecho un tiempo.

Ese paréntesis termina mañana. Concluye sobre las tablas del Principal para abrir, desde las 18.00 horas, el ciclo que el escenario de la calle San Prudencio dedica todos los inviernos al público familiar, a esos espectadores a los que la Red Municipal de Teatros de la capital alavesa debería rendir un homenaje puesto que su fidelidad parece no tener límite. Tanto es así que para este reestreno de Tira! Aurrera! hace semanas que no quedan entradas, aunque a última hora van a salir como unas 50 butacas a taquilla puesto que se ha liberado la parte más cercana al escenario.

Claro que si el Principal tiene fieles seguidores en Gasteiz, qué se puede decir de la compañía alavesa. "Para nosotros siempre es especial estar en casa", admite Idoia Ayestarán, alma del grupo junto a Emilio Fernández de Pinedo.

Él, de hecho, sube al escenario para dar vida a un sin techo que quiere estar solo. No lo tiene sencillo puesto que se encuentra con Maider Galarza, quien se pone en la piel de una niña consentida que tiene ganas de ser el centro de atención. Ambos protagonizan una historia en la que la crisis se encuentra al fondo, pero también las relaciones humanas, la imaginación, el juego... Todo ello a través del trabajo de intérpretes y títeres, santo y seña de Panta Rhei, que una vez más ha vuelto a contar en esta propuesta con la colaboración de Juan Rodríguez, Nils Personne e Ylva Varick, sus cómplices suecos.

"Es una aventura urbana donde, como en la vida, hay unas de cal y otras de arena. Eso sí, como siempre, terminamos abriendo una gran puerta a la esperanza", dice Ayestarán, que recomienda el montaje para mayores de cinco años.

Eso sí, tras la cita de mañana al montaje le esperan más encuentros con el público, los más inmediatos en Bilbao y Donostia. También en Gasteiz, dice Ayestarán sin querer dar más detalles. Todavía hay más, eso sí, ya que la compañía está cerrando ahora la gira que en 2012 tiene previsto realizar con la versión en castellano de la obra por México y Costa Rica. Y por el camino, el grupo realizará dos nuevos estrenos. El primero llegará en mayo con un espectáculo de calle. El segundo, en octubre. Pero serán buenas noticias que ya habrá tiempo para contar.