DOS de las marcas de moda más conocidas a nivel internacional han presentado esta semana su unión en el diseño. La juvenil Desigual cuenta entre sus nuevos diseños con la mano del diseñador de alta costura, Christian Lacroix. Con esta colección que estará disponible en las tiendas de Desigual a partir de septiembre, la firma creada a principios de los 80 por el suizo afincada en Ibiza, Thomas Meyer, debuta en el prêt-à-porter.
Las propuestas de Lacroix cerraron la presentación de la colección Dream para mujer, hombre y niño que ha preparado Desigual para el próximo otoño-invierno, y en la que por primera vez hay también una línea de ropa interior muy colorida, muy sexy: muy Desigual.
Cinturas marcadas, vestidos muy cortos y medias leggings, todo ello con colores vivos y hasta un estampado con la cara de Marilyn Monroe, definen este "aperitivo" de una colección que se presentará en su totalidad el próximo mes de julio.
La colección supone además el regreso de Lacroix al mundo de la moda después de que la firma francesa, propiedad del grupo estadounidense Falic, se declarara en suspensión de pagos por la crisis financiera.
Manel Adell, consejero delegado de Desigual, declaró a Efe que esperaba que la colaboración con Lacroix sea "de largo recorrido, de tres o cuatro colecciones", ya que "no es una aventura de una temporada", y que luego se verá si esta colaboración se alarga.
"Estamos en un noviazgo", dijo, que explicó que lo mas difícil del fichaje de Lacroix fue encontrar un momento para quedar, por los problemas de agenda de ambos, pero que luego todo fue muy rápido.
"Ya hace tres meses que trabajamos. Lacroix ha venido varias veces a Barcelona y hemos visto que tenemos cosas en común y él ha tenido plena libertad para desarrollar el concepto Desigual a su manera", comentó Adell.Una etiqueta con la caricatura de Lacroix en la que se puede leer Desigual by y una L colgando, identificarán las prendas de Monsieur Lacroix, como se denomina al diseñador en Desigual para evitar problemas legales con la marca que se identifica con su nombre.
Sin perder el estilo Lacroix, los 15 looks son mucho más informales y populares que los que hasta ahora había diseñado para clientes ricos y exclusivos.
Aunque solo se vieron prendas para mujer, no se descarta que al completar la colección que han acordado Lacroix y Desigual haya algunas prendas para hombre.
La presentación de las colecciones tuvo una puesta en escena "como en casa", mezclando a los asistentes con las modelos en un local junto al centro de diseño de la firma, en pleno ensanche barcelonés, y como siempre las mezclas y combinaciones imposibles que son como el resultado de un sueño han sido el sello de la marca.
Para las mujeres, Desigual propone prendas inspiradas en la Europa del este para el día, muy cálidas y confortables, y por vestidos sexy para la noche. La colección de hombre es la más Desigual, con muchas cazadoras en las que mezcla telas sastreras con tricot de lana, denim o algodones; en la destinada a las niñas y adolescentes se mezclan estampados galácticos, flores y piezas folk, y para los chicos se han creado prendas de estética urbana y muy poco convencional.
Desigual, que ya ha cumplido 25 años en el mercado, ofreció una colección mucho más serena que en otras temporadas y más comercial, quizás menos Desigual que otras veces pero más sólida.
Con un crecimiento sostenido superior al 50% anual, Desigual cuenta con una plantilla de 2.800 personas y con una red de 200 tiendas propias. También está presente en más de 7.000 establecimientos multimarca, y en 1.700 corners en grandes almacenes.