Vitoria. No son buenos tiempos para las cuestiones del dinero. Artium lo sabe bien. Hace doce meses ya vivió un recorte de casi el 9% para poder componer sus cuentas de 2010. Y el nuevo año no es que venga con demasiadas buenas noticias debajo del brazo. Por lo menos, eso sí, el museo alavés va a conseguir salvar algo los muebles y mantenerse en las mismas cifras, con algo más de cinco millones de euros de presupuesto, un 0,6% más.

Las cifras aprobadas ayer en la reunión del Patronato hablan de una situación ya conocida y que pasa por seguir manteniendo el cinturón bien apretado. Hasta el momento, el centro ha conseguido que estos exiguos números no se noten demasiado ni en su oferta expositiva ni tampoco en la de actividades paralelas, un camino a seguir en un 2011 en el que se mantienen medidas como los cambios de horario (con el cierre al mediodía y la prolongación de horarios por la tarde los viernes y fines de semana), la tarifa general de 6 euros (a lo que hay que sumar los bonos anuales y la entrada Tú decides) y otras herramientas puestas en marcha para optimizar los recursos y ajustar lo más posible las cuentas.

De los algo más de cinco millones de presupuesto, la Diputación sigue siendo el mayor sustento del museo con un 53% de aportación. Otro 27% viene vía autofinanciación, es decir, de ingresos no institucionales, patrocinio privado y recursos propios (1.360.000 euros). Muy por detrás se sitúan los apoyos del Gobierno Vasco (12%), el Ayuntamiento de Gasteiz (5%) y el Ministerio de Cultura (3%).

Así las cosas, es evidente que el barco capitaneado por Daniel Castillejo va a tener que esperar mejor ocasión para seguir creciendo en lo económico. Tal vez a 2012.

Todo ello se decidió ayer dentro del pleno del Patronato de la Fundación Artium, una reunión ya típica a final de año que, eso sí, esta vez tuvo algo diferente. Y es que tras la marcha de Lorena López de Lacalle, la nueva diputada de Cultura, Malentxo Arruabarrena, se estrenó en el museo, de cuyo Comité Ejecutivo será presidenta. No fue la única cara diferente, ya que también acudió al encuentro el recién nombrado director foral del mismo área, Ramón Berriozábal.