Vitoria. El saxo vuelve a ser protagonista. El éxito cosechado el año pasado entre los propios músicos, estudiantes y profesionales, y el público, es la mejor garantía para seguir un camino iniciado hace doce meses. Así lo entienden Iñigo Ibaibarriaga y Josetxo Silguero, responsables de las Jornadas Vascas de Saxofón, que mañana tomarán durante todo el día el interior del Conservatorio Jesús Guridi.
En esta ocasión, se ha querido centrar el también denominado Sax Atak Festival en la improvisación y las nuevas tecnologías. Y bajo ese criterio se producirán varias de las actuaciones previstas en la capital alavesa, todas ellas con entrada gratuita. "No es algo sólo para músicos, todo lo contrario; queremos que tanto ellos como los espectadores puedan disfrutar", comentaron ayer los organizadores de un evento al que ya han confirmado su asistencia más de 20 escuelas y conservatorios del País Vasco.
De hecho, el día arrancará al mediodía con una actuación en la que tomarán parte diferentes grupos de estudiantes. Es más, se calcula que unos 80 jóvenes intérpretes pasen por las tablas del Aula Magna del conservatorio alavés.
Ya a las 16.00 horas se retomará la actividad sonora. Y lo hará de la mano de uno de los músicos estatales más interesantes de la actualidad, Libert Fortuny. El barcelonés acudirá para, como él sabe hacer, combinar su instrumento con la electrónica para dejarse llevar por las sendas del jazz.
También desde la ciudad condal acudirá Iñaki Arnal, aunque él, en realidad, es gasteiztarra. Será a partir de las 17.00 horas cuando expondrá de manera práctica su metodología de trabajo.
Una hora después será el turno para Pedro Saxo, uno de los grandes triunfadores del año pasado, que regresa a las jornadas para presentar su nuevo proyecto, El ser humano por encima del saxofón.
El punto y final llegará a las 19.00 horas. En ese momento, la música llegará de la mano del Aula de Jazz de Musikene, que cada vez está consiguiendo más prestigio dentro y fuera del País Vasco.
Eso sí, en este sentido, tanto Ibaibarriaga como Silguero, aseguraron que es un pena que el conservatorio superior ubicado en Donostia cuente con esta especialidad y, sin embargo, en el camino pedagógico anterior no esté recogida la enseñanza en este género.