dulantzi. La tragicómica historia de dos toros que se preguntan por el sentido de la vida recalará hoy domingo en el auditorio Txema Blasco de Dulantzi a las 19.30 horas de la mano de la compañía burgalesa El Duende. Los personajes de Torito Bravo se plantean cuestiones acerca del amor, que vuelve necios a los listos y a los tontos más estúpidos aún. A través de los mugidos, las siestas y las embestidas de estos animales, el público irá descubriendo la historia de una verdadera amistad.

El humor y el amor serán temas protagonistas esta tarde gracias a Torito Bravo, comedia de la compañía burgalesa El Duende Teatro que, a través de las vivencias de dos toros, traslada al público la tragicómica historia de la vida. La obra, de Patxo Tellería y Aitor Mazo, estará dirigida por Isabel González Sualdea. Elías Tristán dará vida a Percatao y Nacho Liarte será Lunero. Dos toros que hablan y también sestean, mugen, embisten.Uno de ellos escucha la radio. Dos senderos distintos y una amistad.

En 1991, con la representación de la obra Pares y Nines, de José Luis Alonso de Santos, se formaba la compañía burgalesa El Duende Teatro y, desde entonces, han pasado por él muchos jóvenes de Gumiel de Mercado y de la Ribera del Duero burgalesa. Han participado en diferentes certámenes de teatro aficionado con obras como Uña y carne, de Rafael Mendizábal; El gran teatro del mundo, de Calderón de la Barca; A ver si podemos, de Zanguango Teatro; o La mandrágora, de Nicolás Maquiavelo, entre otras muchas. Torito Bravo llega hoy a la cuarta edición del Festival de Teatro Amateur de Dulantzi.

tramo final Sus montajes buscan algo más que la pura diversión del espectador, es decir, provocar en él un instante -o algo más- de reflexión y crecimiento personal, pero sin dejar de trabajar el desarrollo del actor. El Duende Teatro, con su Torito Bravo, cerrará la segunda tanda de actuaciones de la cuarta edición del Festival de Teatro Amateur de Dulantzi, que concluirá la próxima semana con las actuaciones del grupo getxotarra Hezgaitz y de la compañía de Lleida La inestable. Dulantzi apura sus últimas tracas escénicas.