Vitoria. Al otro lado del espejo. Es allí donde viaja el último protagonista de ficción del escritor Hubert Haddad, que se acerca esta tarde a Gasteiz, concretamente al museo Artium, para presentar su novela Palestina (Editorial Demipage), que bucea desde su historia -siempre con un ideal de paz- en la realidad de Oriente Medio, en el sempiterno conflicto palestino-israelí.

Premio Renaudot de bolsillo en 2009 y Premio de los Cinco Continentes de la Francofonía en 2008, la narración parte con el asalto de un comando palestino a una patrulla israelí, en algún lugar de Cisjordania entre la Línea Verde -establecida en el armisticio árabe-israelí de 1949, conquistada luego por Israel en la Guerra de los Seis Días- y el cinturón de seguridad.

Un soldado israelí es secuestrado por el comando, finalmente aniquilado, y -herido y en estado de shock- pierde cualquier referencia y olvida incluso su nombre. Sin documentos, vestido de civil e incluso con un keffiyeh al cuello, el soldado es rescatado por dos mujeres palestinas que le curan y le dan cobijo. Al otro lado del espejo, se convierte en Nessim y, durante su convalecencia, descubre y sufre el dolor del pueblo palestino en la Cisjordania ocupada.

Hubert Haddad huye de maniqueísmos. De padre tunecino -nació en la capital en 1947- y madre argelina, llegó a Francia muy joven, y siempre ha tenido muy presentes tanto sus raíces judías como las bereberes. Es judío y árabe pacifista, y por ello busca con esta novela la precisión de las palabras, tratando de prestar atención a esos matices que siempre se dejan atrás en los debates y conversaciones sobre el eterno enfrentamiento. Haddad ha escrito más de quince novelas, pero es ahora cuando ha conseguido llegar al gran público con una obra donde humanidad y poesía se adentran en el corazón del desastre mostrando la realidad de la gente que lo habita.

A partir de las 19.30 horas, Hubert Haddad participará junto al escritor Antonio Altarriba -catedrático de Literatura Francesa en la Facultad de Filología de la Universidad del País Vasco- en un encuentro organizado por la Asociación de Escritores de Euskadi (AEE/EIE) donde, a través de las palabras, esta vez habladas, y del debate, tratará de transmitir las claves de su novela y de toda la intrahistoria que cimienta su ficción.

Durante la infancia de Hubert, Baya, su abuela argelina, vertía lágrimas al pronunciar el nombre de un país perdido. «Me imaginaba esa Palestina de olivos y ciudades santas como un lugar mítico de reencuentro en el que Baya dejaría de llorar». Cuando surge el estado de Israel, el niño asiste, en un medio judío tradicionalista familiar, a "una increíble exaltación asociada a la cultura religiosa. Es frente a Israel cuando se encarna fuertemente el nacionalismo palestino. Pero entre nosotros hay muchos, judíos y árabes, que piensan que los dos estados de derecho llegarán a estar en paz algún día cercano. En Palestina intenté comunicar esto".

Palestina es un libro "grave, muy fuerte, muy humano", asegura Le Clézio, Nobel de Literatura en 2008. "La novela es esta magia que permite pensar libremente la historia, que conlleva un tipo de objetividad intuitiva en la que, aunque no se sepa la solución, uno se convence de que la hay". Sólo por eso merece la pena adentrarse y escuchar la página que hoy abre Artium.