Vitoria. El tradicional concierto de presentación del Azkena Rock Festival se estrenó ayer en un nuevo escenario, el Teatro Principal. Allí esperaba Quique González, que contó, como teloneros, con los Arizona Baby. Un buen número de asistentes casi colgó el cartel de completo para asistir a este aperitivo del macroencuentro. Una cita en la que González, sólo como él sabe hacerlo, creó una atmósfera especial gracias a los temas de su último disco, Daiquiri blues, aunque también hubo tiempo para canciones de tiempos pasado. Fue el mejor preludio para lo que va a suceder desde hoy en Mendizabala, un recinto que Quique ya visitó en la edición de 2007 del ARF. Foto: Jorge Muñoz