Vitoria. Con la mirada puesta de forma especial en el arte contemporáneo vasco y buscando aliados dentro y fuera del Estado tanto para producir exposiciones como para tener la posibilidad de exportarlas. Artium se acerca a 2010 impregnado ya al 100% por la filosofía de Daniel Castillejo, sabiendo que en la cuestión monetaria va a tener que ajustarse el bolsillo pero sin que ello se traduzca en recortes sustanciales de cara al público.

El director del museo alavés presentó ayer las líneas básicas de la programación expositiva de cara al año que está a punto de comenzar, apuestas con nombres propios que tomarán el relevo a las muestras inauguradas en este 2009 pero a las que todavía les queda tiempo para encontrarse con los espectadores (Gure Artea, Yo y el otro. Diálogos y El tiempo que venga). El gasteiztarra Aitor Lajarín (que en estos momentos reside en Estados Unidos), el bilbaíno Miguel Ángel Gaüeca y el navarro Txuspo Poyo conformarán la mirada cercana, a la que se unirán, desde fuera, el canario Juan Hidalgo y el argentino Jaime Davidovich (también afincado en Norteamérica). Todo ello, además de otras propuestas, se completará con la décima revisión de la colección permanente, que se centrará en las obras adquiridas de forma más reciente por el centro.

Asimismo, Artium mantendrá el mismo esquema temporal que el probado durante este 2009. Es decir, hasta finales de agosto seguirá con su programación de forma habitual. Pero en ese momento, cerrará sus salas expositivas (que no el museo en su totalidad) para hacer una inauguración conjunta el 1 de octubre de varias muestras al mismo tiempo, algo que a juicio del centro ha dado muy buenos resultados esta vez.

Propuestas Siguiendo las hojas del calendario, la primera de las nuevas caras en hacer acto de presencia será la de Gaüeca, quien abrirá Deals, Shapes and Void, que combinará piezas ya presentes en los fondos del museo alavés con nuevas obras de reciente creación, uniendo fotografía y escultura. La muestra intentará acercarse, a través del autorretrato, a los entresijos de la personalidad del ser humano pero también del artista. Esta producción del centro quiere poner en valor a uno de los valores más sólidos del arte contemporáneo vasco, un nombre que está cruzando fronteras a cada paso.

El relevo lo tomará todo un veterano que sigue en la misma brecha de lo último, de lo que está todavía por venir. Hidalgo, cuya obra no es ninguna desconocida (por fortuna) para Gasteiz, ofrecerá Desde Ayacata, una coproducción con Tenerife Espacio de las Artes (TEA). En su caso, se trata de una retrospectiva parcial en la que se incluirán creaciones de los últimos años, un total de 68 piezas en las que predomina la fotografía (gran protagonista, por cierto, del próximo año en el centro alavés).

Desde Alsasua, ya en primavera, llegará Poyo, artista multidisciplinar que ofrecerá en la capital alavesa U.N (Inverse), una animación en 3D que toma como punto de partida para desarrollar su contenido al edificio de las Naciones Unidas ubicado en Nueva York.

Ya en octubre, volverá a casa Lajarín con From here to everywhere. Hace ya tres años que el artista vitoriano se trasladó a Los Ángeles. Lo hizo con una beca de un año dada por Artium, aunque terminada la subvención decidió quedarse allí. Es la ciudad norteamericana la que le sirve al autor alavés como punto de partida para un trabajo que se acerca a la ciudad contemporánea desde distintas perspectivas.

La última cara del año (más allá de la nueva revisión de la colección permanente) será la de Davidovich con una exposición comisariada por Arturo y Fito Rodríguez que el museo quiere exportar a Argentina y Estados Unidos. El creador de Buenos Aires es todo un pionero en trasladar el arte a la televisión, conformando una trayectoria envidiable aunque tal vez no demasiado conocida a este lado del Atlántico.