l Ernesto de Hannover reaparece entre rumores de crisis. Sin rastro del príncipe Ernesto hasta esta misma semana. Desapareció de la vida pública tras los primeros rumores de separación. Hace ya tres meses. Se había visto juntos a los Hannover por última vez el pasado 20 de julio en Bonifacio (Córcega) con motivo del cumpleaños de su hija en común, la princesa Alejandra, y, desde entonces, han estado haciendo vidas separadas: la princesa Carolina ha establecido su residencia nuevamente en el Principado de Mónaco, donde logrado cierta normalidad, mientras el príncipe Ernesto permanece en el hogar familiar en Fontainebleu (cerca de París). Si bien en estos meses de especulaciones la Princesa ha dado la cara en distintos compromisos oficiales -el trabajo parece haberse convertido en una buenísima válvula de escape de las preocupaciones- y algunas salidas privadas con sus hijos, su esposo no ha dado señales de vida y ha permanecido desde el pasado septiembre a la sombra de su habitualmente apretada agenda social. El desmentido oficial de su separación ha contrastado con las ausencias del Príncipe.
l Robbie Williams hace una propuesta de matrimonio de broma. La pedida de matrimonio que Robbie Williams hizo ayer a su novia, la actriz australiana Ayda Field, durante un programa de radio en directo en Sidney, fue una broma, según su representante. El portavoz del cantante de pop reconoció que Robbie había hecho la pregunta a su novia, "pero en plan de broma". Y agregó: "No están prometidos". Williams, ex cantante del grupo Take That, se encuentra en Australia haciendo una gira promocional de su nuevo álbum, "Reality Killed The Video Star". El británico le hizo la proposición a su novia al enterarse por el presentador de que Sidney tiene reputación de ser ciudad de bodas improvisadas de famosos, como las de Elton John y Michael Jackson que se celebraron allí. Entonces, se volvió a su novia y le dijo: "¿Hay alguien con quien quieras casarte?", a lo que Field respondió: "Me da vergüenza ahora", y Williams continuó: "¿Quieres casarte conmigo?". "Sí, quiero", respondió Field. Entonces, Williams le pidió prestado un anillo a una de las asistentes del programa de radio y poniéndoselo a Field en el dedo, le dijo: "¿Quieres ser mi prometida hasta el fin de los tiempos?", a lo que respondió: "Me encantaría ser tu prometida hasta el fin de los tiempos".
