París. El cineasta Roman Polanski, detenido en Suiza desde hace dos meses, no aceptará ser extraditado a Estados Unidos, que le reclama por un delito cometido hace 32 años, afirmó su abogado, Hervé Temime. "Consideramos que Roman Polanski ha purgado ya su pena", afirmó el letrado en una entrevista que ayer publicó el diario Le Figaro.

El director de películas como El pianista o Chinatown fue detenido en Suiza porque Estados Unidos lo reclama por la violación de una niña de 13 años en los años 70.

El abogado recordó que el director de cine se sometió en 1978 a pruebas psicológicas que demostraron su ausencia de peligrosidad.

"Polanski no tuvo un proceso leal en Los Ángeles. Por esas razones y otras su posición es invariable: no aceptará ser extraditado a Estados Unidos", añadió.

Temime pidió que la justicia suiza admita su nueva demanda de liberación provisional de su cliente, tras haber rechazado el pasado 20 de octubre una solicitud similar.

"Desde entonces hemos aportado garantías más fuertes y apropiadas", aseguró el abogado, quien señaló que, desde entonces, la petición de extradición de Estados Unidos ha pasado de contener una pena de 50 años a una de dos.

El letrado indicó que Polanski se ha comprometido a no dejar Suiza mientras dure el proceso de extradición, se mostró dispuesto a ser puesto bajo residencia vigilada en su casa de Gstaad, a llevar un brazalete electrónico y a ofrecer como fianza "una suma de dinero significativa en función de sus medios financieros".

El abogado del cineasta de origen polaco, de 76 años, "pasa sus días solo en una celda con una ventana con barrotes" pese a lo cual no se queja de su estado.

"Se muestra muy valiente en esta situación, pese a que considera que tiene una duración injusta. Sin embargo, la situación es difícil de soportar para su esposa y sus dos hijos de 11 y 16 años, que están muy preocupados por él", agregó.

Polanski vive en Francia y viajaba regularmente a su casa de vacaciones en Gstaad, en Suiza, y nunca fue molestado por la Policía hasta su detención. A fines de septiembre fue detenido al llegar a Zurich para asistir a homenaje por su legado cinematográfico. Al parecer, ofreció su casa de vacaciones como fianza para su liberación.