MADRID. Los arquitectos de KWKPromes han querido hacer una casa que dé seguridad a sus clientes. "El elemento más esencial para nuestros clientes es tener una sensación de máxima seguridad", comentan los responsables de la casa en la descripción del proyecto. Dicho y hecho. La casa en cuestión, bautizada como 'Casa segura', está construida en una parcela de 2.500 metros cuadrados.
El arquitecto Robert Konieczny ha creado una estructura de 566,5 metros cuadrados principalmente de hormigón. La vivienda cuenta con unas paredes de grosor considerable (no precisado en el proyecto), que tienen la peculiaridad de poder moverse para transformar la vivienda en un cubo infranqueable. El diseño original de la casa cuenta con un jardín acotado por dos paredes de hormigón, que cuando los usuarios lo desean se desplaza formando el mencionado cuadrado.
La idea es que los usuarios puedan cambiar a su antojo esta disposición cuando abandonen la vivienda o cuando estén dentro y no quieran que nadie pueda entrar. En la parte posterior de la casa hay una gran placa de vidrio, que según el diseño de los arquitectos, puede funcionar como pantalla de cine.
En el momento en el que los usuarios desean poner la casa en 'modo seguro', el material del cristal hace que no se pueda penetrar en la casa, haciendo que la única entrada sea la parte delantera de la casa. Los arquitectos no precisan cómo funciona el mecanismo de seguridad, aunque los usuario podrán variar esta disposición en cualquier momento. Los arquitectos polacos encargados del proyecto han ido un paso más allá en el concepto de tecnología aplicada a la seguridad en el hogar.