En la estadística del primer partido de la semifinal contra el Real Madrid disputado el pasado jueves, llaman especialmente la atención los números de un jugador baskonista. Tadas Sedekerskis, que disputó poco más de tres minutos y que solo entró en la cancha cuando el partido ya estaba decidido, fue el tercer jugador más valorado del cuadro de Spahija con 10 créditos, solo por detrás de Alec Peters y Matt Costello, que registraron 14 y 16 respectivamente.

El alero lituano es el jugador que menos cuenta para Spahija de los 12 convocados habituales y el primer cruce de la serie fue buena muestra de ello, ya que el canterano azulgrana fue el que menos minutos estuvo sobre la cancha, por detrás de otros jóvenes como Kurucs y Raieste. Durante esos algo más de tres minutos, Sedekerskis sumó cinco puntos con un triple y dos tiros libres, recogió tres rebotes y el +/- con él en la cancha fue de +10 para el Baskonia, el mejor del equipo junto a Granger. Es cierto que ya estaba todo decidido y que el Madrid también tenía a sus suplentes sobre la cancha, pero no por ello llama menos la atención que el técnico no cuente con alguien cuya aportación es tan positiva cuando participa.

En un partido como el de el jueves, en el que a Fontecchio se le notó muy fatigado por el esfuerzo realizado contra el Valencia Basket y que podía haber sido una buena oportunidad para contar con Tadas, Spahija dejó claro que confía más en Sander Raieste, pese a que el estonio solo manchó su estadística con una asistencia y un robo en los casi diez minutos que disputó. Lo mismo sucedió en los cuartos de final, en los que el lituano anotó dos puntos en minuto y medio disputado en total entre los tres encuentros, mientras que Raieste se quedó en cero en los ocho minutos que jugó.

De más a menos

Las estadísticas de Sedekerskis en lo que va de temporada en ACB siguen siendo buenas, con 4,1 puntos, 4 rebotes, 1 asistencia y 7,9 créditos en 15:29 minutos de media, registros superiores a los de Marinkovic, Wetzell, Raieste y Kurucs este curso. Eso sí, el lituano está viviendo de las rentas conseguidas a principio de temporada con Dusko Ivanovic en el banquillo, para quien era una pieza fundamental. En los diez duelos que disputó a las órdenes del montenegrino en ACB, el canterano promedió 7,4 puntos, 6,8 rebotes y 14,8 créditos de valoración en una media de casi 26 minutos por encuentro, mientras que desde la llegada de Spahija al banquillo no llega a los 10 minutos disputados por partido.

De hecho, prácticamente jugó los mismos minutos en 10 partidos con Dusko (258) que en los 28 que ha dirigido Spahija en lo que va de curso en la Liga Endesa (267). Además, su participación ha ido cayendo según ha avanzado la temporada y especialmente desde que regresó Peters tras lesión, hasta el punto en de haber promediado poco más de dos minutos de juego en sus últimos diez choques oficiales de ACB.

En resumen, Sedekerskis ha pasado de ser la gran revelación del equipo a principio de temporada y vivir sus mejores momentos como profesional a un ostracismo a final de campaña que es difícil de explicar con números o motivos baloncestísticos. Demostró con Dusko ser un un soldado comprometido y dispuesto a cualquier cosa para ayudar al equipo y ante el Real Madrid se vio que sigue preparado por si se solicita su ayuda, pero por alguna razón permanece en la reserva en tiempos de guerra.