Tras numerosos mercados estivales renunciando a dicha posibilidad, el Baskonia se ha propuesto atacar el fichaje de un cupo de formación que en esta ocasión no sea un canterano. El espectacular crecimiento de Xabi López-Arostegui, incluido esta temporada en el mejor quinteto de la ACB y uno de los mejores activos del Joventut tras su llegada a Badalona siendo prácticamente un adolescente, no ha pasado desapercibido para el club vitoriano, uno de los aspirantes a reclutar al exterior vizcaíno de cara a la próxima temporada.
El Baskonia sigue muy de cerca los pasos de este pujante jugador de 24 años y dos metros de altura que se encuentra muy codiciado tras el estelar rendimiento a las órdenes de Carles Durán. No en vano, López-Arostegui viene de pulverizar sus topes anotadores con 12,1 puntos de media, un notable 40% en triples o una extrema fiabilidad desde el tiro libre. También ha sido el jugador nacional más valorado (14,1) y el alero más reboteador de la competición (4,8), siendo el sexto en el global de capturas defensivas (3,9). Y todo ello aderezado con 1,2 recuperaciones por partido.
Números dignos de elogio que han colocado en el escaparate a un jugador al que todavía le queda un año más de contrato con la Penya, cuyos intentos por renovarle van a quedar seguramente en agua de borrajas. López-Arostegui ha desestimado las sucesivas propuestas de ampliación de contrato que le ha trasladado el presidente Juanan Morales porque ya se siente preparado para desafíos más importantes. Lógicamente, uno de ellos es el de jugar para algún club de Euroliga como el Baskonia, firme aspirante a reclutarle junto al Valencia Basket, fuera ya del cartel de la máxima competición continental para el curso 2021-22 y que deberá conformarse esta vez con disputar la Eurocopa. Por razones obvias, la entidad alavesa parte con cierta ventaja a la hora de seducirle.
Sin embargo, el futuro de López-Arostegui no se resolverá a corto plazo por un motivo claro. Su cláusula de rescisión se verá reducida de forma considerable dentro de unas semanas, en concreto a partir de julio. Entonces será el momento en que el vizcaíno deshoje definitivamente la margarita y su marcha del Olímpico de Badalona adquiera velocidad de crucero.
"Ha llegado el momento de pensar en mi futuro. Después de esta temporada, que ha ido bien, tendré que tomar una decisión. Espero que sea lo mejor para mi progresión. Esta es una carrera corta, con contratos cortos y hay que pasar por el proceso de valorarlo todo antes de decidir. ¿Ofertas? Sí, las hay. El Joventut quiere que me quede en Badalona y yo lo agradezco mucho pero a día de hoy tengo más opciones", explicó López-Arostegui en una reciente entrevista a Crónica Vasca.
excepción en una filosofía El desenlace de la operación tampoco tiene excesivo misterio ya que, previsiblemente, será el propio alero getxotarra quien deba hacer frente con el dinero de su propio bolsillo a la indemnización que costee su salida de tierras catalanas. Para ello, lógicamente necesitará una oferta lucrativa en cuanto a dinero y también duración. Un esfuerzo que el Baskonia está dispuesto a hacer teniendo en cuenta que el suyo constituye un fichaje estratégico a la hora de cumplir la legislación vigente durante los próximos años.
Dado que es un mercado caro y con escasas gangas, la entidad del Buesa Arena siempre se ha mostrada reacia a apostar por jugadores españoles. Desde el verano de 2015 cuando incorporó a Alberto Corbacho -un triplista que no cumplió las expectativas a las órdenes de Perasovic y apenas duraría una temporada- y obviando la reciente llegada de Quino Colom en un contexto de necesidad por la marcha de Luca Vildoza, no ha existido una apuesta clara por algún cupo español.
Con López-Arostegui se producirá una excepción si el todavía miembro de la Penya acepta vestir de azulgrana en el futuro. El vizcaíno, cuyo desembarco es independiente de lo que suceda con Rokas Giedraitis, tiene un buen físico para competir en la Euroliga -algo que el Baskonia prioriza cada vez más a la hora de elegir jugadores- y todavía posee a su edad un evidente margen de mejora. Con él, se aseguraría por fin un cupo muy válido y capaz de aportar minutos de calidad. Un rendimiento inmediato que en el caso de otros canteranos con dicha vitola -léase los bisoños Kurucs o Raieste- se encuentra en tela de juicio. Ambos han sido los jugadores de formación junto a los ya consolidados Tadas y Diop.
Lugar de nacimiento. Getxo, Bizkaia.
Edad. 24 años (19-05-1997).
Altura. Dos metros.
Posición. Alero.
Trayectoria. Ha desarrollado toda su carrera en el Joventut, al que llegó en 2011 para jugar con el equipo cadete. En 2015 fue cedido al CB Prat pero en las últimas temporadas se ha asentado en el primer equipo verdinegro. Viene de promediar 12,1 puntos, 4,8 rebotes y 1,2 recuperaciones. También acumula seis internacionalidades con España tras haber sido convocado en las últimas ventanas FIBA.
El Valencia también puja por el jugador vizcaíno, que considera agotado su ciclo en Badalona pese a tener un año más de contrato
