La abstinencia ha sido muy dura para todo el mundo. Sin embargo, por fin regresa el baloncesto al Buesa Arena. Tras más de tres semanas de inactividad por culpa del brote de coronavirus que ha sacudido bruscamente a su vestuario, el Baskonia retoma esta tarde el pulso a la Liga ACB. Y lo hace recibiendo al Joventut en lo que supondrá el primer examen de un ajetreado calendario antes del cierre de la fase regular, donde disputará cinco compromisos en el corto intervalo de trece días.

Desde el lejano 18 de abril, en concreto aquel domingo en el que hincó la rodilla ante el San Pablo Burgos en la cancha de Zurbano dejando evidentes síntomas de agotamiento físico y mental, el Baskonia ha pasado a la clandestinidad más absoluta. Entre el obligado descanso que debía afrontar al acoger la Liga Endesa esta temporada a un número impar de equipos y el destrozo causado por el patógeno, que afecta actualmente a cinco miembros del equipo, el retorno a la actividad está presidido por numerosas incógnitas.

Cuando una locomotora que transita a toda velocidad como la azulgrana, acostumbrada a disputar incluso tres partidos por semana, sufre un parón de estas características, las consecuencias pueden ser muy graves. Básicamente porque la pérdida de ritmo, química y automatismos parece inevitable.

El problema añadido no solo es que Dusko Ivanovic vaya a presentar hoy un roster de absolutas circunstancias. El montenegrino apenas ha podido entrenar en los últimos tiempos con la intensidad y eficacia que tanto desea debido a la falta de efectivos. Algo que previsiblemente redundará en un Baskonia espeso, pesado, sin chispa y falto de clarividencia en ataque.

En tiempos de precariedad, la mejor solución es tirar de cantera. Al plantel vitoriano se suman por obligación Pavel Savkov y Ondrej Hanzlik, dos jóvenes que han militado con éxito durante este curso en el Juaristi de LEB Plata. Ambos canteranos, dados de alta para esta jornada en la ACB, podrían incluso disponer de minutos en función de la identidad de las bajas con que cuente esta tarde el técnico montenegrino.

Salvo Sedekerskis, el primer jugador en sufrir el coronavirus tras la infausta visita al Murcia -el origen de todos los males data de la visita a tierras levantinas- que por fortuna ya ha recibido el alta médica, el Baskonia no ha deslizado la identidad de los jugadores afectados por el virus. Por las fotos subidas a redes sociales en los últimos días, entre los jugadores sanos se encuentran Polonara, Diop o Jekiri.

Precisamente la vuelta del rocoso poste poste nigeriano y el debut de Quino Colom, que también pasó el covid-19 en Belgrado pero ha superado ya sin problemas el reconocimiento, son las noticias positivas antes de afrontar la peligrosa visita verdinegra. Jekiri está listo para reaparecer tras el esguince de rodilla sufrido a mediados de marzo en Miribilla ante el Bilbao Basket y el base andorrano será de la partida pese a los pocos entrenamientos en la centrifugadora de Zurbano ante las urgencias en el timón provocadas por el adiós de Vildoza.

Por su parte, el Joventut también llega a Vitoria con su correspondiente cuota de problemas físicos. El cuadro verdinegro, séptimo clasificado, está completando una buena temporada y su presencia en los play off por el título se encuentra virtualmente garantizada.

En Vitoria, eso sí, no estarán Demetrius Jackson, Arturs Zagars y Xabi López-Arostegui, su gran sensación de los últimos tiempos al que muchos ya sitúan en el Valencia Basket de cara al futuro. La veteranía de Pau Ribas y Ante Tomic es un filón para la Penya, que también se nutre del desparpajo de Dimitrijevic -otro proyecto de gran jugador con visos de acabar en el club taronja- y el saber estar de Bassas en la dirección, la versatilidad de Brodziansky o la amenaza triplista del clásico cuatro abierto como Morgan.

El Baskonia necesita la victoria de forma imperiosa si no quiere ver comprometida la cuarta posición. Las últimas victorias del Valencia Basket, que ya ha adelantado a los vitorianos en la tabla si bien tiene tres partidos más disputados, han reducido el margen de error. Tras la visita del Joventut, los hombres de Ivanovic jugarán el jueves en Donosti ante el GBC y recibirán el domingo al Unicaja antes de la doble salida de la próxima semana ante el Barcelona y el Manresa.

Será el tercer enfrentamiento de la campaña entre vitorianos y catalanes, que de momento marchan igualados (1-1). El Baskonia cayó en Badalona en la ida sobre la bocina tras un triple de Bassas, pero en cuartos de la Copa se tomó la revancha.

dusko ivanovic: "HEMOS HECHO UN BUEN TRABAJO"

A por el mejor puesto. Los contratiempos sufridos por el Baskonia en los últimos tiempos son evidentes pero Ivanovic no es de los que baje el listón de la exigencia ni ponga excusas por mucho que casi no disponga de efectivos para hacer un cinco contra cinco. "Después de pasar todo este tiempo sin entrenar, hemos hecho un buen trabajo. Nos han ayudado mucho los jóvenes del filial para mantener el ritmo. Espero que estemos en buena forma. Con los jugadores que sufren el covid-19 y el adiós de Luca, será un poco más difícil. Sin embargo, el objetivo va a ser el mismo. Lucharemos por ser terceros y, si no, cuartos de la fase regular. Aprovecharemos los cinco partidos para intentar conseguir la mejor clasificación posible antes del play off. Este primer partido será el más difícil, una cosa es el entrenamiento como hemos hecho y otra distinta el partido. Confío en que podamos hacer un buen papel", aseveró el entrenador montenegrino, que elogió la buena mezcla de "juventud y experiencia" del Joventut así como "el dominio" de Ante Tomic en el juego interior. El poste croata podría visitar hoy por última vez el Buesa si termina dando el salto al baloncesto chino en el próximo mercado estival.