- Con los doce equipos en Valencia desde el pasado jueves, metidos en esa burbuja de seguridad que únicamente pueden abandonar para entrenar y que aún les impide tener contacto entre ellos, la fase final de la Liga Endesa se encuentra ya en su particular cuenta atrás antes de que el balón vuelva a lanzarse al aire el próximo miércoles. Lo goloso que hay en juego, un título liguero, y el escaso número de partidos que hay que disputar para alcanzarlo, siete, hacen que las distintas escuadras comparezcan, pese a las adversidades de los últimos meses, con el cuchillo entre los dientes.

Eso sí, las probabilidades de éxito no son nada equilibradas, ya que la densidad del calendario hace que el fondo de armario, su cantidad y calidad, vaya a ser más valioso que nunca. Y en ese sentido, el desequilibrio entre los participantes es plausible, con el Baskonia entre los menos mermados del selecto bloque de aspirantes al cetro.

Pese a la espantada de Semaj Christon, la baja de Patricio Garino tras no haberse recuperado de la rotura del cruzado de su rodilla o los problemas de fascia plantar de Youssoupha Fall, Dusko Ivanovic podrá oponer una rotación importante de, al menos, diez efectivos en todos los partidos, contando con dieciséis jugadores inscritos.

El montenegrino posee un núcleo duro integrado formado por cuatro bases (Pierria Henry, Luca Vildoza, Jayson Granger y Sergi García), tres exteriores (Zoran Dragic, Matt Janning y Shavon Shields) y cuatro interiores (Toko Shengelia, Achille Polonara, Micheal Eric e Ilimane Diop). El entrenador montenegrino también se ha llevado a tierras levantinas a los canteranos Miguel González, Tadas Sedekerskis, Arturs Kurucs y Sander Raieste, aunque todo hace indicar que ni siquiera serán convocados para disputar alguno de los cinco encuentros previstos.

Entre los rivales azulgranas en el grupo A, se dan todo tipo de situaciones. Álex Mumbrú ya avanzó que Jaylon Brown, de baja desde antes del parón provocado por la pandemia del covid-19, no se vestirá de corto y que Arnoldas Kulboka -que, tal y como anunció el sábado el club, permanecerá dos campañas más en el Bilbao Basket- es seria duda por unos problemas de rodilla. Por tanto, la rotación habitual del técnico catalán se verá acortada y jugadores como Tomeu Rigo o Iván Cruz deberán asumir más responsabilidades.

El Barcelona, uno de los grandes aspirantes al título por la amplitud y calidad de su plantilla, ha perdido al base Malcolm Delaney, pero en la misma posición recupera dos efectivos de primer nivel: Thomas Heurtel y Kevin Pangos (Svetislav Pesic tendrá también a su disposición a los prometedores Leandro Bolmaro y Sergi Martínez).

El Unicaja, por su parte, tiene cuatro bajas (Axel Toupane, Jaime Fernández, Dragan Milosavljevic y Francis Alonso), pero hizo los deberes en febrero y marzo (fichó entre otros a Axel Bouteille) y contará en Valencia con una solvente rotación de catorce jugadores.

El Iberostar Tenerife de Txus Vidorreta tampoco presenta bajas y sumará al joven base Alberto Cabrera a los catorce componentes de su primer plantel, mientras que es el Joventut el que más debilitado comparece. Tony Wroten y Luke Harangody cortaron sus contratos y para suplirles Carles Duran ha tirado de cantera, alistando al escolta Pep Busquets y al ala-pívot Arnau Parrado.

En el grupo B, el Real Madrid se presenta en esta fase final con su rotación de quince jugadores de primer nivel en perfecto estado de revista. Otro de los grandes aspirantes, el anfitrión Valencia Basket, tiene la baja de Guillem Vives, que en el regreso a los entrenamientos se rompió un dedo de su mano izquierda, pero Jaume Ponsarnau tiene a su disposición a trece jugadores de primer nivel.

El Gran Canaria no presenta bajas y viaja con cuatro promesas de sus categorías inferiores (Olek Balcerowski, Khalifa Diop, Jovan Kljajic y Jean Montero) para reforzar las sesiones de trabajo y dos equipos como Andorra y Burgos se han movido esta semana para maquillar ausencias.

Los de Ibon Navarro, con su juego interior renqueante por la baja por lesión de Moussa Diagne y los problemas de Dejan Musli y Tyson Pérez, han incorporado al pívot Tunde Olumuyiwa, mientras que los de Joan Peñarroya, tras la salida del equipo de Earl Clark, han fichado al ala-pívot Pablo Aguilar.

Sin duda, el equipo más debilitado de esta fase final en cuanto a efectivos es el Casademont Zaragoza. Con el lituano Ronie Seibutis de baja todo el ejercicio y Javier Justiz también lesionado, Fran Vázquez ha optado por la retirada y Jason Thompson y DJ Seeley decidieron regresar a Estados Unidos en plena pandemia. Porfirio Fisac dará más minutos a los jóvenes y ha incluido en la expedición a promesas como Jaime Pradilla, Ander Urdiain y Aitor Etxeguren.