VITORIA - El Kirolbet Baskonia perdió ante el Alba (81-57) en Euroliga en el que era el debut de Dusko Ivanovic como entrenador del conjunto gasteiztarra, después de que los máximos mandatarios del club azulgrana tomaran la decisión de prescindir de los servicios de Velimir Perasovic. Entre las quejas del croata estaba la falta de efectivos válidos para afrontar ambas competiciones. Por ello, aunque no lo reconoció de manera pública, forzó a muchos jugadores titulares a sumar una cantidad increíble de minutos. Esto llevó a que, entre otros, Toko Shengelia haya acumulado un evidente desgaste y que en pocas ocasiones se le viera sentado en el banquillo.

Pues bien, este hecho cambió ayer en Berlín con el debut de Ivanovic. Se vio a un Shengelia perdido, abatido, desorientado, desacertado, superado y, en muchas ocasiones, fuera de sus casillas al no salirle las cosas. En resumidas cuentas, un capitán totalmente irreconocible que no hizo más que convertirse en el triste espejo de la mediocridad en la que se ha instalado hoy en día el Baskonia, que ha buscado con el cambio de entrenador un salto de calidad que por el momento no ha conseguido. En caso de que llegue, tardará en hacerlo. El técnico montenegrino tiene mucho trabajo para resetear la cabeza de unos jugadores reos de la desconfianza, entre ellos un Shengelia que ayer firmó el peor partido que se le recuerda con la elástica azulgrana.

El georgiano había sido durante la última etapa la prolongación de Perasovic sobre la cancha y un seguro de vida en el puesto de cuatro. El jugador que siempre sabían los rivales que había que parar y en el que sus compañeros podían apoyarse. En tierras alemanas no fue así para mayor depresión de un Baskonia inoperante e impotente. El capitán no tuvo el día y se vio desde el primer momento con la cantidad de balones fallados en ataque o su falta de contundencia en defensa.

En la primera parte el Kirolbet tan solo logró 26 puntos, 15 en el primer cuarto y once en el segundo. Toko, por su parte, tan solo sumó un punto desde el tiro libre. Además de esto, el capitán perdió con claridad su particular duelo ante Sikma. El ex del Valencia Basket superó al azulgrana en todo. Sobre todo, en la motivación y en el saber que es posible.

Shengelia pasó mucho tiempo en el banquillo ante la sorpresa generalizada. Algo totalmente extraño vista la ingente cantidad de minutos con Perasovic. Está claro que Dusko Ivanovic aprovechó la cita para ver a más jugadores en una situación de adversidad. Hombres como Polonara, desaparecido durante la etapa con el técnico de Split, o el propio Diop recibieron la alternativa mientras estuvo en el banquillo. Sea lo que fuera, ayer se vio a un equipo menor como el Alba Berlin superar a un visitante en horas bajas y con un capitán completamente irreconocible. Puro reflejo de la situación actual del Baskonia, un grupo que no escapa de la depresión.