Vitoria - El Olympiacos, inmerso en la temporada más atípica de su historia, hizo oficial el domingo que Kestutis Kemzura, de 49 años, será finalmente su entrenador para lo que resta de temporada. Todo hacía indicar que la promoción del lituano como relevo de David Blatt en el banquillo del próximo rival del Baskonia sería algo temporal. De hecho, ya habían circulado los primeros nombres para hacerse con las riendas del equipo como Georgios Bartzokas, Xavi Pascual o Scott Skiles. Sin embargo, será el ayudante del estadounidense desde el arranque del pasado ejercicio quien se quede al frente del laureado club afincado en El Pireo.

Kemzura ha dirigido dos partidos al Olympiacos como entrenador jefe desde que Blatt acordara su marcha con los hermanos Angelopoulos tras la estrepitosa derrota de los helenos (82-63) en la jornada inaugural en la cancha del humilde Asvel. Su debut resultó inmejorable con una aplastante victoria ante un abúlico Valencia Basket (89-63). Sin embargo, el Zenit San Petersburgo puso de manifiesto una semana más tarde las débiles costuras del próximo adversario baskonista tras profanar (68-77) La Paz y la Amistad en un nivelado duelo que se resolvió en la prórroga.

Lo cierto es que, con independencia de la identidad de su técnico, el Olympiacos acumula ya dos temporadas en las que se ha convertido en una sombra de aquel pétreo, guerrillero y admirable equipo que tuteaba a cualquiera gracias a su extraordinario gen competitivo. Durante la pasada temporada, en la que se quedó fuera del Top 8 contra todo pronóstico, dio más la nota por sus graves problemas extradeportivos que por sus victorias.

Los impagos a la plantilla salieron a la luz pública con excesiva frecuencia, lo que motivó la desbandada de varios jugadores en mitad del curso. Para colmo de males, también quedó certificado el descenso a la segunda división en su torneo doméstico tras una serie de incomparecencias en los encuentros que debían enfrentarle a su acérrimo rival, el Panathinaikos.

El Olympiacos tampoco tiene visos esta campaña de ser un firme candidato a disputar los play off teniendo en cuenta que apenas ha rejuvenecido su veterana plantilla y ha apostado por muchos americanos con escaso pedigrí y reputación. Pese a las ofertas que recibió en el mercado estival por parte del CSKA, todas ellas desestimadas por los rectores griegos, Nikola Milutinov continúa en Atenas como principal boya interior y referente del equipo bajo los tableros.

Kemzura, que desea refuerzos en busca de un salto de calidad dentro de la máxima competición, ha alternado durante estos últimos tiempos su rol de ayudante con el de primer entrenador en clubes como el Lokomotiv Kuban, el Khimki, el Lietuvos Rytas, el Prokom o el Nymburk. También dirigió a Lituania en el Mundial de 2010 celebrado en Turquía, donde el combinado báltico se adjudicó la medalla de bronce quedando tan solo por detrás de la intratable Estados Unidos y el anfitrión otomano. - O. San Martín