Vitoria - El Baskonia está a punto de dejar atrás el verano más atípico que se recuerda debido a la escasez de caras nuevas. En un club como el vitoriano acostumbrado a regenerarse año tras año, unas veces por imperiosa necesidad cuando los clubes europeos más opulentos o la NBA deciden pescar en el Buesa Arena y la mayoría de las ocasiones por expreso deseo de su presidente en busca de la excelencia, la parálisis vivida en este mercado estival constituye un paréntesis con respecto al intenso ajetreo de años anteriores donde la continuidad era una quimera. Previsiblemente, el Kirolbet necesita todavía otro interior más tras la cesión de Youssoupha Fall al Estrasburgo, aunque dicho objetivo tiene visos de demorarse en el tiempo y no sería de extrañar incluso que llegue con la temporada 2018-19 ya en marcha.

Podía intuirse con razón que la concesión de la Final a Cuatro de la Euroliga a Vitoria iba a poner los dientes largos a Josean Querejeta y desatar un frenético torrente de movimientos durante las semanas posteriores a la conquista del subcampeonato liguero, pero finalmente no ha sucedido así y las caras nuevas han llegado con cuentagotas. De esta manera, Pedro Martínez seguirá contando con el grueso del equipo que tan buenos resultados cosechó la pasada campaña. De haber aceptado Rodrigue Beaubois la oferta de renovación azulgrana, un objetivo que se truncó cuando el Anadolu Efes le puso encima de la mesa al virtuoso francés un contrato multimillonario por dos años, la única modificación a estas alturas habría sido la presencia de Shavon Shields en lugar de Janis Timma, nuevo integrante del Olympiacos.

Conscientes de la enorme valía del grupo que estuvo a punto de acabar en junio de este año con la prolongada sequía de títulos, Josean Querejeta y Pedro Martínez no han dudado en dar un voto de confianza a un plantel que ya ha dado muestras de lo que es capaz y merecía la oportunidad de intentar hacer algo grande en la próxima Euroliga. Si bien el panorama podría haber cambiado de no haber recibido alguna negativa, la idea tanto del presidente como del técnico pasaba por realizar los mínimos retoques y eso es básicamente lo que ha sucedido.

tres fichajes en 2008 Pues bien, solo existe un precedente en los últimos tiempos en cuanto a esta apuesta por la continuidad. Fue concretamente en el verano de 2008, justo al poco de que el Baskonia condujese la segunda ACB de la historia a las vitrinas del Buesa Arena. De cara a la siguiente temporada, el club consiguió mantener ese exitoso bloque -Prigioni, Rakocevic, Vidal, Rakocevic, Mickeal, Teletovic o Splitter, entre otros, daban lustre a aquel grupo- y apenas introdujo tres variaciones. De un Akasvayu Girona ya en ruinas que se deshizo en pedazos tras un único año en la elite se incorporó Fernando San Emeterio, para relevar a Zoran Planinic en la dirección aterrizó un desconocido como Mustafa Shakur y, por último, Ariel Eslava fue el escogido como cupo con el fin de cumplir la legislación vigente en la ACB.

Ese flamante trío de fichajes estaría dirigido por Dusko Ivanovic, relevo en el banquillo de un Neven Spahijo al que los graves brotes de indisciplina que salpicaron al vestuario -sin obviar el célebre accidente de coche en la rotonda de Miraflores tras una noche de fiesta- terminaron costándole el puesto. Con el curso 2008-09 ya iniciado, eso sí, se registrarían novedades en la dirección ante la fallida apuesta por el base estadounidense procedente del Prokom polaco -le relevaron en primera instancia Vlado Ilievski y más tarde John Lucas III- o el aterrizaje de temporeros que paliasen los típicos problemas de lesiones como Robert Hite o Víctor Baldo.

El sonado éxito de la temporada anterior abrió la puerta a que continuase en Vitoria la flor y nata de un equipo campeón. Ahora se repite la misma historia en vísperas de un ejercicio histórico que amanece con la esperanza de que la silueta del Kirolbet luzca en el magno evento previsto en del mayo del año que viene en el Buesa Arena.

2008-09. San Emeterio, Skakur y un cupo como Eslava fueron las solitarias caras nuevas.

2009-10. Se incorporaron Huertas, English, Oleson, Pau Ribas, Herrmann y Eliyahu.

2010-11. Haislip, Nemanja Bjelica, Logan y Pietrus reforzaron el plantel azulgrana.

2011-12. Los fichajes fueron Heurtel, Reggie Williams, Milko Bjelica y Dorsey. Aprovechando el ‘lockout’ de la NBA, también llegaron Goran Dragic y Seraphin.

2012-13. El club buscó un salto de calidad con Causeur, Pleiss, Rochestie y Cabezas.

2013-14. Scariolo tuvo a su disposición a Hodge, Hanga, Mainoldi, Hamilton y Kelati.

2014-15. Un verano de lo más frenético con Tillie, Iverson, Bertans, Orlando Johnson, Gomes, White y Perkins.

2015-16. Aterrizaron Anosike -relevado por Bourousis-, Blazic, Corbacho y Planinic.

2016-17. Larkin, Luz, Bargnani, Voigtmann, Beaubois y Cooney.

2017-18. Huertas, Granger, Vildoza, Janning, Timma, Garino y Poirier fueron las nuevas altas.