vitoria - El Baskonia ha convertido definitivamente a Toko Shengelia en el emblema sobre el que quiere sustentar su proyecto de los próximos años. El club oficializó ayer un secreto a voces como era su renovación por dos temporadas más, es decir hasta junio de 2022. Una continuidad que ya estaba apalabrada e incluso firmada desde hace varias semanas pero que carecía del rango de oficial hasta ayer, justo un día antes del arranque de la pretemporada.
Aquel menudo ala-pívot aterrizado en Vitoria en el verano de 2014 sin hacer excesivo ruido y tras una oscura trayectoria en la NBA, donde no cuajó primero en los Nets ni más tarde en los Bulls, iniciará hoy su quinta temporada como azulgrana. De cumplir este nuevo vínculo, Toko estiraría a ocho los años en los que ha dispuesto de una taquilla en el vestuario del Buesa Arena. Ello implica un arraigo prácticamente desconocido desde el nacimiento del Baskonia, donde contadísimos jugadores han protagonizado hasta la fecha una militancia tan longeva.
Por si existían dudas, el georgiano pasa a ser ya uno de los baloncestistas más carismáticos en la historia de un club siempre adicto a la cirugía y a los drásticos lavados de cara cada vez que llega el mercado estival. Entre su creciente valía sobre la cancha, su compromiso fuera de la misma y el cariño de una afición que le venera como pocos, Josean Querejeta pretende que Shengelia sea durante los próximos años el buque insignia de un equipo empeñado en retornar a la senda de los títulos y discutir la supremacía de los grandes transatlánticos.
Como no podía ser de otra forma, no se conocen excesivos detalles del nuevo vínculo entre las dos partes. Sin embargo, a nadie se le escapa que Shengelia, cuyo anterior contrato finalizaba en 2020, será uno de los jugadores mejor pagados dentro del Viejo Continente y también del Baskonia. Al mismo nivel o incluso por encima de San Emeterio. Las cifras que circulaban ayer en algún medio son para asustar y hablan por sí solas: 6,5 millones de euros limpios para los próximos cuatro años.
importancia creciente Consciente de la ascendencia de su capitán y de que ya no quedan excesivos jugadores determinantes a este lado del Atlántico, el club alavés no ha dudado en realizar un titánico esfuerzo con el propósito de intentar aplazar al máximo su posible vuelta a la NBA y evitar los cantos de sirena procedentes de los colosos europeos. Tras esta nueva entente, se mantienen las correspondientes cláusulas de salida hacia la mejor liga del mundo. En cambio, no hay un precio establecido de antemano si quien llama a la puerta de Shengelia es, por ejemplo, un grande de la Euroliga. Entonces sería el propio Baskonia quien podría fijar una cuantía por las nubes, por lo que todo hace indicar que, de emigrar en el futuro, el georgiano tan solo lo hará con destino a la NBA.
La importancia de Toko en Vitoria ha ido creciendo con el paso del tiempo. Las lesiones no le dieron tregua en las primeras temporadas, sobre todo la rodilla o el tobillo. Por ejemplo, se perdió dos ediciones de un torneo tan atractivo como la Copa del Rey debido a diferentes percances. Sin embargo, en los dos recientes ejercicios ha gozado de la ansiada continuidad hasta convertirse en una pieza casi insustituible para el Baskonia, con el que ha alcanzado la madurez a sus 26 años tras una carrera que se inició en las categorías inferiores del Valencia Basket.
Un prematuro salto a la NBA hizo que su juego se estancara, pero ha sido a raíz de vestir la elástica azulgrana cuando ha mostrado todo su esplendor como baloncestista. Difícilmente puede observarse hoy en día otro cuatro más solvente que él en Europa. Pese a su mala lectura del juego en algunas fases de los partidos, en líneas generales atesora una amalgama de recursos que le convierten en alguien diferencial. Shengelia ha tratado este verano de hacer realidad el sueño de retornar a la mejor liga del mundo, pero ninguna franquicia ha apostado lo suficientemente fuerte como para hacer realidad su objetivo. El próximo mercado estival, volverá a intentarlo.