vitoria - Si ha habido un jugador beneficiado por el adiós de Kevin Jones y el reciclaje de Johannes Voigtmann al puesto de cuatro, ese no ha sido otro que Ilimane Diop. Hubo un momento de la actual temporada en que el senegalés cayó en el más absoluto de los olvidos para Pedro Martínez, a quien no le resultaba fácil gestionar una rotación interior integrada por tres cincos puros hasta que los acontecimientos se precipitaron con la marcha del neoyorquino.

El alemán con alma de base, convertido ya en el escudero de Toko Shengelia ante la paulatina pérdida de confianza del preparador catalán en el bisoño Rinalds Malmanis, ha liberado los minutos que ahora se reparten Vincent Poirier y el canterano azulgrana, eso sí con una mayor cuota de protagonismo para el francés.

Sin embargo, Ilimane vuelve a sentirse un poste útil en la rotación de un Baskonia que necesitará a todos sus elementos en perfectas condiciones físicas y anímicas para afrontar una recta final de la temporada plagada de alicientes. A sus 23 años recién cumplidos y con el hambre intacta, el cinco nacido en Dakar viene de cuajar ante el Andorra su actuación más completa de la presente campaña.

En menos de 17 minutos sobre la cancha del Buesa Arena, Diop se fue hasta los 24 dígitos de valoración tras sumar 14 puntos -hizo un pleno en tiros de dos y desde la personal-, 5 rebotes, 3 tapones y 4 faltas recibidas. Y todo ello aderezado de esas conocidas toneladas de pasión en cada acción que, de vez en cuando, le juegan malas pasadas.

“Acabé contento por lo que hice el otro día. Estoy aquí para ayudar al equipo. Cuando salgo, siempre voy a dar mi máximo. Debo seguir trabajando”, reflexionó Ilimane tras el entrenamiento matinal. El canterano recibió los elogios de Pedro Martínez, poco dado a personalizar en las victorias pero que en esta ocasión hizo una excepción para premiar la actitud y el esfuerzo de un pívot que campaña tras campaña trata de abrirse espacio en la zona de un Baskonia que siempre dispone de jugadores más glamourosos en dicho puesto.

“Cuando el entrenador habla bien de ti, es un plus. Siempre doy el máximo. Al final, esto es mi trabajo, solo tengo el baloncesto y debo estar cada día a tope para que las cosas salgan bien”, manifestó con sinceridad Ilimane, internacional absoluto con la selección española y que cumple su quinta temporada con el Baskonia en la élite. Pese a su juventud, el espigado poste de 211 centímetros está acumulando una importante experiencia a nivel internacional. No en vano, ya le adornan la friolera de 133 partidos en la Liga ACB y 102 en la Euroliga.