las palmas - El motivo era la falta de acuerdo con la ACB para la renovación del convenio que une a ambas partes, con un punto -el fondo social- como principal foco de fricción. Tras la mediación del CSD, en el último momento un preacuerdo hizo posible la desconvocatoria del paro y que el torneo del K.O. pudiese celebrarse con normalidad. El presidente del sindicato de jugadores, Alfonso Reyes, ha seguido desde la grada la competición y, satisfecho por que no haya sido necesario recurrir a medidas extremas, explica en esta entrevista los motivos de la posición de los jugadores.

Ha estado en toda la Copa, ¿cómo la ha vivido? ¿Qué balance realiza?

-La verdad es que ha sido un torneo muy interesante. Como en todas, ha habido sorpresas, emoción y creo que hemos podido ver partidos muy atractivos porque además la mayoría se han resuelto por un margen ajustado.

¿Cómo vio el duelo de cuartos de final entre el Baskonia y el Barcelona, le sorprendió?

-Fue un partidazo, la verdad. Aunque venía en una temporada un poco irregular ya sabíamos que el Barcelona tenía un equipazo y que en cualquier momento podía sacar lo mejor de sí mismo. El Baskonia hizo un grandísimo partido, Shengelia estuvo espectacular, pero al final tuvo más acierto el Barcelona. La resolución además tuvo mucha emoción, porque parecía que el Barcelona lo tenía todo hecho pero hubo ahí una pérdida de balón con tres abajo el Baskonia que le dio otra vez una opción. Pero en general estuvo más fino el Barcelona .

En cualquier caso, la mejor noticia es que se pueda estar hablando de la Copa con normalidad después de toda la tensión vivida en los días previos.

-Sí, está claro, aunque yo era el primero que quería que hubiese Copa. Lo que ocurre es que las circunstancias hicieron que se convocase esa huelga. No por deseo propio, evidentemente, pero era la única manera de que a los jugadores se les respetase y se les reconociese la importancia que tienen. Por fin pudo llegarse a un preacuerdo y yo pienso que tenemos que estar todos muy contentos porque ha sido bueno tanto para los jugadores como para la liga. Y a partir de ahora pues todos juntos en la misma dirección.

¿Este acuerdo puede ser un primer paso para un cambio que necesita el baloncesto?

-El baloncesto necesita mucha unidad, porque cuanto más unidos estemos más fuerza tendremos. Eso lo hemos demostrado los jugadores estas semanas y es el único camino que hay, la unidad.

¿Cómo explicaría su posición a los que no entendían que los jugadores adoptasen una medida tan contundente por no conseguir un solo punto de los que reclamaban a la ACB?

-Al final lo que había que saber era que el paquete de medidas era una unidad, no se podía desgajar. Sin una cosa no valían las otras y viceversa. Tanto la ACB como nosotros hemos cedido una parte con el objetivo de poder conseguir lo que queríamos todos, que era que hubiese acuerdo, que pudiéramos disfrutar de la Copa y que los jugadores tengan mucho más peso del que han tenido hasta ahora. Que se les reconozca la importancia que merecen.

¿Si no hubiera llegado el acuerdo y no se hubiera podido disputar esta Copa habría sido un golpe muy duro para todas las partes y que habría herido gravemente al baloncesto?

-Sí, sí. Yo no quería pensarlo siquiera. A pesar de que los jugadores nos exigían que llegáramos a un acuerdo, pero claro, lo más beneficioso para todos. Y yo creo que finalmente ha sido lo que se ha conseguido.

¿A partir de ahora por qué camino tiene que transitar este deporte para fortalecerse?

-Yo creo que hemos mejorado en el tema de protección al jugador, que para que un club pueda ejercer su derecho no pueda tener deudas, se ha subido el fondo de garantía salarial que es el que permite pagar deudas también, se ha elevado el salario mínimo... Esos pasos ya se han conseguido en esos apartados pero, además, tenemos también los que podemos considerar males generales. Falta de identificación, amenazas que vienen desde fuera y yo creo que necesitamos una ACB fuerte para poder afrontar esos retos.

Y eventos como este son el mejor escaparate.

-Sí, la verdad es que la Copa es la mejor competición que tenemos. Y se demuestra pues viendo a todas las aficiones, la del Baskonia especialmente que es espectacular, pero las otras siete también. Han continuado aquí a pesar de que no estuvieran sus equipos pero ellos siguen dando calor y color al torneo. Es un momento excelente para disfrutar, ver buen baloncesto y vivir la experiencia que proporciona este deporte al máximo.

En el apartado personal, ¿le ha tocado pasar nervios viendo a su hermano Felipe en la pista o después de tantos años ya lo lleva con tranquilidad?.

-No, no, ya no. Además todos los jugadores, las ocho plantillas, me han demostrado que merecen mucho la pena. La del Baskonia especialmente. Porque en todo momento han apostado por estar unidos al resto a pesar de que por la configuración que tiene podría parecer que no es la mejor porque menos un par de jugadores son todos extranjeros. Pero hemos demostrado que aquí da igual españoles que extranjeros. Estando unidos, no hay ningún rival que se nos resista.