vitoria - Uno de los problemas que habían penalizado considerablemente al Baskonia en sus últimas comparecencias había sido su tibia puesta en escena. Como si al traspasar la puerta de salida del vestuario se desconectase el interruptor que regula su tensión, el equipo arrancaba los encuentros sin la intensidad necesaria y los rivales aprovechaban esas facilidades para adquirir una jugosa renta que obligaba a los vitorianos a un extraordinario esfuerzo añadido para reengancharse a las contiendas. El mismo guión se había repetido varias veces en poco tiempo y, por ello, Pedro Martínez alertó antes de recibir al Estrella Roja de la imperiosa necesidad de darle carpetazo. Y, afortundamente, sus discípulos le hicieron caso.
De esta manera, el pabellón de Zurbano asistió por fin al ansiado cambio de tendencia. La escuadra azulgrana saltó al parqué con la lección aprendida y pisó con fuerza el pie del acelerador desde el mismo salto inicial. Con un Rodrigue Beaubois estelar en esta fase -anotó nada menos que catorce puntos en apenas cinco minutos y cuarenta segundos-, imprimió un ritmo endiablado a su juego y dejó claro al combinado serbio que no estaba dispuesto a cederle la iniciativa.
Incluso cuando el acierto comenzó a bajar hasta niveles más humanos, el Baskonia fue capaz de conservar el mando apoyándose en un notable trabajo defensivo que provocó que su contrincante se sintiese incómodo en todo momento.
La consecuencia directa de esto fue que el marcador a la conclusión del primer cuarto mostraba una tranquilizadora renta de diez puntos favorables al cuadro local (27-17) y, lo que todavía es más importante, que el Estrella Roja se convenció por la vía de los hechos consumados de que necesitaría un esfuerzo sobrehumano para poder tener opciones de triunfo. Todo lo contrario, claro está, que un Baskonia que no se bajó en ningún momento del tren de alta velocidad en el que inició el duelo y que le condujo hasta el triunfo.
El Baskonia mostró una imagen coral ante los endebles serbios y ello se tradujo en que varios de sus jugadores lucieron su calidad en el plano individual.