Vitoria - El gran culebrón del verano en el panorama baloncestístico europeo vivió ayer su anunciado capítulo final con la oficialización por parte de Baskonia y Barcelona del traspaso de Adam Hanga, un acuerdo que, como anunció DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, se cerró entre los clubes el pasado viernes 12 de agosto y se acabó de concretar por completo a lo largo de la pasada semana. Una vez definidos todos los aspectos económicos a la hora de proceder a desembolsar los cerca de 500.000 euros que percibirá el club del Buesa Arena por el traspaso, la operación desembocó en la presencia del alero húngaro el lunes en la Ciudad Condal para pasar reconocimiento médico y proceder a la firma que le unirá al club culé durante las tres próximas temporadas. A partir de ahora, el exterior magiar se convertirá en uno de los jugadores mejor pagados del Viejo Continente, ya que se embolsará alrededor de dos millones y medio de euros brutos por cada uno de los tres años de vinculación recién suscritos, con una cláusula de salida a la NBA de millón y medio.

Hanga pone fin a una relación de cuatro años con el Baskonia, con el que jugó tres temporadas completas y el tramo final de una de ellas hasta convertirse en los dos últimos cursos en uno de los aleros de referencia en la Euroliga, donde la última campaña ha sido destacado como el mejor defensor. Su sueño era dar este verano el salto a la NBA, pero los San Antonio Spurs, poseedores de sus derechos, no tenían hueco en su plantilla para ofrecerle un contrato. Ahí se desató la pelea por su fichaje, con el Barcelona haciéndole una oferta multimillonaria que fue igualada desde Vitoria haciendo uso del derecho de tanteo.

Ese escenario desembocó en una situación de tensión que ha agriado unas relaciones entre clubes que siempre han sido cercanas y cordiales. En la cúpula del Buesa Arena hay resquemor con la actuación del Barça, primero por no informar de sus intenciones -sí lo hicieron en el caso de Shane Larkin- y después por cerrarse en banda a una negociación. Incluso, lo que es bastante raro, el máximo mandatario baskonista ha renunciado a una compensación económica mayor al plantarse el club catalán en los 300.000 euros, saliendo finalmente la parte restante del pago del bolsillo del propio Hanga, con cuyo entorno el Baskonia tampoco ha quedado para nada contento por sus movimientos.

El club vitoriano pierde a uno de sus grandes referentes a lo largo de las dos últimas campañas, pero consigue sacar una reseñable ganancia económica de un jugador que terminaba contrato y que podía haber salido del club sin haber dejado dinero en caja. Además, después de haber ejecutado el derecho de tanteo, tampoco quedará la entidad azulgrana hipotecada con un contrato que se encuentra entre los más elevados del mercado.

Cerrada esta larga y enrevesada operación, en las oficinas del Buesa Arena se trabaja ahora para buscar un ala-pívot y, casi con total seguridad, un jugador exterior más que completen la plantilla. - DNA