vitoria - Nada bueno podía augurar el mal gesto de Sergio Llull con su rodilla derecha mientras conducía un contraataque, ni los escalofriantes gritos de dolor que profirió el balear segundos después, cuando yacía en el suelo. Tanto el seleccionador nacional, Sergio Scariolo, como el resto de jugadores del combinado español querían ser optimistas con el pronóstico del jugador del Real Madrid, pero las sensaciones invitaban a pensar todo lo contrario. Unas horas después del amistoso, que perdió su interés nada más producirse la lesión, confirmaron los peores presagios para el de Mahón. Se había roto el ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha y decía adiós no solo al Eurobasket, sino también a gran parte de la temporada con el cuadro blanco. Las pruebas a las que se sometió ayer determinarán con exactitud su plazo de recuperación, que estarán entre seis y nueve meses. El Real Madrid deberá volver al mercado y buscar un sustituto al base de 29 años, dado que el único uno que poseen ahora mismo en plantilla es Luka Doncic. Un mercado en el que también se encuentra sumergido el Baskonia, expectante a la decisión de Jayson Granger. Pablo Laso deberá enfrentarse a la siguiente campaña sin el vigente MVP de la Euroliga y de la ACB, lo que mermará las opciones de estos en el curso 2017-18.
Por su parte, la selección española, que sufrió en el amistoso del martes su peor derrota en mucho tiempo frente a Bélgica (71-89), deberá afrontar el Eurobasket sin uno de los activos más importantes en el exterior y un puesto de escolta muy mermado. Solo Juan Carlos Navarro se presenta como un dos puro, aunque los mejores días del catalán hayan pasado tiempo atrás. El exbaskonista Fernando San Emeterio emerge como la principal opción de Scariolo para completar el cinco titular. - A. Mateos