vitoria ? Que Pablo Prigioni estaba predestinado antes o después a ejercer como entrenador una vez colgase las botas era algo que cualquier entendido del baloncesto tenía más que interiorizado. Lo que nadie podía imaginar, sin embargo, era que diese el paso tan pronto, con 40 primaveras recién cumplidas y apenas cinco meses después de cerrar su ciclo como jugador de forma abrupta en el Baskonia tras disputar únicamente seis partidos. La oportunidad le ha llegado de manera prematura de la mano de Josean Querejeta, un perfecto conocedor de su evolución como jugador y al que no le ha temblado el pulso a la hora de concederle la alternativa en un momento donde ningún entrenador del exterior colma sus ambiciosas expectativas.
Pablo Prigioni ya ha sido cuestionado en más de una ocasión en alguna entrevista sobre la posibilidad de iniciar su carrera como entrenador. Al poco de finalizar su segunda temporada en la NBA, concretamente los Knicks de Nueva York, y de regreso a Vitoria para pasar las vacaciones, DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA tuvo la posibilidad de mantener en mayo de 2014 una amplia conversación con el base de Río Tercero en la que valoró, entre otras cosas, su posible salto a los banquillos.
Su respuesta en aquel momento no dejó excesivo lugar a las dudas respecto al camino que tomaría en su vida al anunciar su retirada de las canchas. “Podría ser que ejerza como técnico en un futuro. Hoy disfruto jugando y compitiendo. Me gusta mucho prepararme para dar un buen nivel. Mientras ese deseo no decaiga, físicamente pueda hacerlo y mentalmente me encuentre fuerte, voy a seguir jugando. Cuando tenga que cerrar este libro, puede que se abra otro en el banquillo. Pero hay que esperar un tiempo para eso”, aseguró por entonces Prigioni, que se apuntó a primeros de abril de este año al curso de Entrenador Superior de la Federación que le habilitará sin problemas para poder dirigir al Baskonia. l