Vitoria - En el colmo del absurdo, la Euroliga persiste esta temporada en el sistemático error de provocar situaciones anómalas en las dos últimas jornadas cuanto todavía restan cosas trascendentales por decidir. Mientras otras competiciones europeas y torneos de otros deportes no dudan en unificar los horarios de los equipos que se juegan algo importante, el organismo presidido por Jordi Bertomeu sigue yendo por libre en este sentido y provocando hechos kafkianos. Las dos últimas jornadas, en las que todavía bailan los puestos que van del primero al séptimo clasificado de la fase regular, volverán a jugarse en días y horas diferentes.
El Baskonia, por ejemplo, se enfrenta este viernes al Galatasaray a partir de las 19.00 horas en Estambul. Lo hará antes de que entren en liza dos rivales directos en la pelea por la cuarta plaza como el Panathinaikos y el Fenerbahce. Los griegos se medirán al CSKA en el OAKA a las 20.45 horas, mientras que el duelo de los turcos en el WiZink Center ante el Real Madrid arrancará quince minutos más tarde. Otros implicados en la pelea como Efes y Olympiacos se miden entre sí un día antes en Estambul. El Darussafaka, que rivaliza con el Estrella Roja por la octava y última plaza para acceder al play off de cuartos, competirá esta penúltima jornada casi 24 horas antes que los serbios.
En el cierre de la fase regular, la situación volverá a ser surrealista con el Baskonia viéndose obligado a jugar el jueves 6 de abril ante el Zalgiris en el Buesa Arena. Ese mismo día, el Panathinaikos actuará en Tel Aviv y el Fenerbahce recibirá en su casa al Barcelona. Un día más tarde, en cambio, tendrán lugar dos partidos de alto voltaje en los que algunos equipos pueden decidir su propio destino siendo incluso preferible para sus intereses una derrota. El resultado del CSKA-Olympiacos y Real Madrid-Anadolu Efes puede condicionar, por ejemplo, la identidad del rival del cuadro vitoriano en la antesala de la Final Four. En definitiva, algo ciertamente dantesco que deja en muy mal lugar a una Euroliga de tanto prestigio.