vitoria - Quedan unos meses para que expire su contrato con el Baskonia y Adam Hanga tendrá que acostumbrarse ya a que en cualquier comparecencia pública se le interrogue por la compleja posibilidad de que prorrogue su vínculo y eche raíces en la capital alavesa. El alero húngaro, capitán y uno de los grandes estandartes del club vitoriano, confirmó ayer la noticia que DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA adelantó el pasado 20 de febrero. Sobre la mesa cuenta desde hace semanas con una propuesta de renovación para seguir ataviado de azulgrana durante las próximas temporadas. Sin embargo, está por ver si la firme pretensión del Baskonia casará con las intenciones de un jugador revalorizado hasta límites insospechados y en la órbita no solo de los grandes transatlánticos de la ACB sino también la mismísima NBA.
“Hemos comenzado a hablar estas últimas semanas. El Baskonia quiere que me quede aquí, pero esto es el trabajo de mi representante. Si yo empiezo a hablar y pensar en estos temas, seguro que va a afectar a mi juego y no quiero que suceda. Les he dicho a mis agentes que no me informen nada del estado de las negociaciones y que hablaremos cuando tengamos algo concreto. Hay una oferta de renovación, pero todavía no es el momento. Lo más importante es jugar bien y el rendimiento del equipo”, subrayó Hanga, cuyo discurso no se escapó ni un milímetro de lo políticamente correcto en estos casos y que, eso sí, se hizo bastante el remolón a la hora de hacer algún tipo de guiño al ofrecimiento llegado desde las oficinas del Buesa Arena.
Sus frías manifestaciones evocaron a las de otros muchos jugadores con pasado azulgrana que finalmente desestimaron los cantos de sirena del Baskonia y terminaron por aceptar una propuesta más tentadora procedente del exterior. Lo cierto es que Josean Querejeta es el primer consciente de que la continuidad de Hanga más allá de junio se halla plagada de dificultades. Pocos aleros ofrece el mercado con la explosividad y la calidad atlética del tres nacido en Budapest, que en abril cumplirá 28 primaveras y está a las puertas de firmar el contrato más oneroso de su carrera deportiva. Su caché se ha puesto por las nubes y en el próximo mercado estival tendrá mucho y bueno donde elegir ante el excelente nivel acreditado durante los dos últimos ejercicios en Vitoria.
abierta la veda De no haber acabado contrato en junio, hubiera cabido la posibilidad de que el Baskonia hiciera negocio con su marcha, pero es el propio Hanga quien tiene en este momento el mango de la sartén en su mano y el que podrá elegir libremente su destino. Sus agentes han abierto la puja entre los posibles interesados mientras en las altas esferas del Buesa no quieren quedarse de brazos cruzados.
Únicamente si el húngaro decide seguir en España al verse tentado por el Real Madrid o el Barcelona -con el que no hubo acuerdo el último verano para su traspaso tras unas ásperas negociaciones-, albergará el Baskonia una mínima posibilidad de retenerle mediante el derecho de tanteo -para ello, Querejeta debería igualar la oferta que el jugador presente de otro club- o, en su defecto, ingresar algo de dinero por su salida. Si su destino es algún país extranjero o la NBA, donde los Spurs ostentan sus derechos desde 2011, el presidente azulgrana no podrá extraer ningún rédito a la marcha de uno de los pesos pesados de la plantilla.
Cuestionado por sus preferencias, Hanga respondió en todo momento con las evasivas inherentes a estos casos. “No quiero pensar mucho en mi renovación. Solo quiero jugar y ganar partidos. Esto es lo más importante para mí en este instante. Todavía tengo contrato con el Baskonia hasta final de temporada. Me siento muy bien aquí, todo el mundo sabe esto. Mis dos niñas nacieron en Vitoria. Creo que estoy jugando bien, pero quiero pensar solo en los próximos encuentros y nada más. Luego ya veremos qué pasa”, zanjó al respecto el todoterreno magiar, autocrítico con su rendimiento en los últimos tiempos. “Creo que mi defensa individual ha bajado y esto es algo que tengo que recuperar”, admitió.