vitoria - El banquillo del Laboral Kutxa está vacante para el próximo curso y a la espera de conocer al que va a ser el séptimo inquilino que en las últimas cinco temporadas se siente y tome las riendas de un puesto que ha perdido la estabilidad y largo plazo que acostumbraba a tener en épocas pasadas.
En menos de cuatro años han sido media docena de técnicos los que han desfilado por el Buesa Arena y que, por diversas causas, ninguno de ellos ha logrado arrancar una segunda temporada como máximo responsable de la plantilla azulgrana. Dusko Ivanovic, Zan Tabak, Sergio Scariolo, Marco Crespi, Ibon Navarro y Velimir Perasovic conforman la lista que se va a ver incrementada con la llegada de otro más, y que pudiera ser Fotis Katsikaris, para suceder al croata que ha optado por aceptar la suculenta propuesta del Andolu Efes de Turquía de cara a la temporada 2016-17.
Únicamente Sergio Scariolo y el propio Velimir Perasovic han sido capaces de completar una temporada desde que Dusko Ivanovic fuera destituido, a finales de 2012, para cerrar nueve años y medio al frente del equipo repartidos en dos etapas. Salvo esas dos excepciones los otros cuatro fueron soluciones temporales sin encontrar la estabilidad ni garantías para asentarse como entrenadores del Baskonia y asimilar la exigencia de mejora y progreso que se impone cada temporada para ser competitivo en todos los frentes.
En noviembre de 2012 Dusko Ivanovic abrió este capítulo de inestabilidad con su marcha del Baskonia. Una derrota en el Buesa Arena ante el Obradoiro fue la espoleta para que el montenegrino dejara el club que le encumbró en los banquillos. Su relevo fue otro balcánico como el croata Zan Tabak que logró concluir la temporada sin meter al equipo en las semifinales ligueras y llegando a disputar los cuartos de final de la Euroliga ante el CSKA de Moscú.
En el curso 2013-14 se optó desde el Baskonia por abrir una segunda etapa de Sergio Scariolo 15 años después de que el italiano llevara al club a su primera final liguera ante el TDK Manresa. Fue esa temporada un ejercicio marcado por las lesiones y cambios en la plantilla que llevaron al actual seleccionador nacional a cumplir solo uno de los dos cursos por los que se comprometió inicialmente y a tener que abonar el club una costosa indemnización.
El curso pasado se exploró de nuevo la vía italiana con la contratación de Marco Crespi aunque a las primeras de cambio, en la séptima jornada liguera, se mutilaron las bases de ese proyecto al destituir a Crespi tras una derrota en la Euroliga ante el Estrella Roja, 66-86. Se puso el equipo en manos de un hombre de la casa como Ibon Navarro que bajó el telón de la temporada como máximo responsable técnico.
Para el año recién finalizado se buscó de nuevo otra segunda etapa para Velimir Perasovic tras su abrupta y extraña salida en 2007 por unas dolencias cardiacas. Con el croata como timonel recuperó el Baskonia sus señas de identidad y la temporada ha sido redonda al volver a jugar la Copa del Rey, las semifinales de la ACB y estar en la quinta Final Four de la historia azulgrana. A pesar de haber vuelto a renacer, Perasovic se ha dejado seducir por la propuesta otomana para volver de nuevo al Efes y dejar al Baskonia en la tesitura de buscar su séptimo entrenador para dar continuidad a lo vivido este año.
Dusko Ivanovic.
Su destitución en noviembre de 2012 abrió el desfile de media docena técnicos desde esa fecha.
Zan Tabak.
El relevo para finalizar la campaña 2012-13. Llegó a disputar los cuartos de final de la Euroliga, pero dejó por vez primera al equipo fuera de las semifinales de ACB tras nueve años.
Sergio Scariolo.
Regresó para una segunda etapa en 2013 pero solo cumplió una de las dos campañas firmadas y hubo que indemnizarle.
Marco Crespi.
La arriesgada apuesta no llegó a los cuatro meses y dirigió al equipo seis jornadas de Liga regular.
Ibon Navarro.
Buen conocedor del club fue el sustituto del italiano y se hizo con las riendas hasta el final de la campaña pasada.
Velimir Perasovic.
Tras su extraña salida del 2007 el croata ha regenenerado la ilusión pero vuelve de nuevo al Efes.