Avisaba Perasovic en la previa de que el duelo ante el Khimki era “la llave para la clasificación”, y a fe que sus jugadores entendieron el mensaje con un triunfo cimentado sobre todo a partir del descanso, donde Baskonia entró en modo equipo para asumir una jugosa ventaja que supo administrar hasta el final. Con el triunfo de ayer ante los rusos, el pase al Top 8 parece un poco más cerca, un escenario no obstante que el croata no quiso ni tan siquiera mentar en rueda de prensa. “Todavía hay que trabajar mucho y remar. ¡No estamos clasificados!”, exclamó el técnico, que ante la insistencia de los periodistas abundó: “Aún hay que trabajar y mucho porque si no trabajas te puedes quedar fuera. No quiero echar las campanas al vuelo, quiero que estemos con los pies en el suelo porque insisto en que no estamos clasificados. Estamos más cerca que ayer, pero aún queda mucho”, zanjó el técnico al respecto antes de valorar el partido. “En la primera mitad hemos jugando muy abiertos, no nos hemos encontrado nunca bien y con una defensa además muy poco agresiva, pero en el tercer cuarto hemos podido romper el partido con muchas buenas defensas, robos de balón y, sobre todo, acierto, y ahí ha estado la clave”. Por último, y respecto al silencio de Indar, el croata reconoció su influencia sobre el equipo: “Con ellos el ambiente es diferente y los jugadores están más arropados y juegan con más energía”. - A. Goñi
- Multimedia
- Servicios
- Participación