vitoria - El Baskonia no deja de sorprender a propios y extraños en una temporada convulsa a más no poder en la que los jugadores van y vienen a un ritmo frenético. Las lesiones de Davis Bertans y Fernando San Emeterio le han obligado a mover nuevamente ficha cuando se acerca el desafío de las series finales por el título. Por ello, el club acaba de emprender la última recomposición de una plantilla sometida a constantes vaivenes tras comunicar ayer el fichaje hasta el final del curso de Scotty Hopson, un alero estadounidense de 2,01 metros y 25 años que ayer mismo aterrizó en la capital alavesa como preludio de un efecto dominó que afectará a otros componentes de la plantilla.

La apuesta por el exterior procedente de la Liga de Desarrollo americana eleva a tres el número de extracomunitarios a las órdenes de Ibon Navarro, algo que no permite la reglamentación vigente de la ACB. De no mediar la consecución de un pasaporte comunitario o cotonou, el Baskonia deberá sacrificar a uno de ellos. Como Darius Adams es indiscutible en una dirección de altas revoluciones, los dedos apuntan claramente al cuestionado Ben Hansbrough. El ex del Gran Canaria, llegado a finales del año pasado en lugar de Sasha Vujacic, se encuentra bajo sospecha debido a su escasa pujanza en ataque. Todo hace indicar que su salida, todavía no anunciada oficialmente, motivará una nueva vuelta de tuerca en un colectivo donde la escasez de efectivos en el perímetro había abierto un socavón de dimensiones gigantescas.

Lo normal es que la pareja de americanos este sábado ante el Fuenlabrada sea ya la integrada por Adams y el propio Hopson, que hace un mes acaparó los flashes mediáticos al otro lado del Atlántico al anotar 52 puntos en un partido de la NBDL contra Reno Bighorns. Si el Laboral ya era de por sí un conjunto de gatillo fácil y con dinamitadores suficientes para hacer la vida imposible a cualquiera, a partir de ahora incrementará su pegada con otro exterior de un perfil anotador, de una constatada exuberancia atlética y con un variado repertorio de movimientos tanto de cara como de espaldas al aro.

Con la salvedad de su lugar de procedencia que obligará a sacrificar a Hansbrough, era un movimiento esperado y con un punto de lógica después de que la grave lesión de Bertans haya dejado al equipo huérfano de su principal bastión ofensivo y de un tres de gran tamaño físico. Sin ser un francotirador tan compulsivo y letal como el letón, Hopson responde a un perfil muy difícil de encontrar hoy en día en el mercado. El tres alto que combine potencia, calidad y talento físico es una especie casi en extinción, de ahí que constituya un fichaje ilusionante.

El Baskonia le ha rescatado de la Liga de Desarrollo de su país natal, el peldaño inmediatamente inferior a la NBA donde, eso sí, tienen cabida jugadores de un caché más bajo. En 43 partidos con el Sioux Falls Skyforce, filial de los Heat de Miami, el de Kentucky ha promediado unos interesantes 19,2 puntos, 3,7 rebotes y 3,3 asistencias de media. Con anterioridad, también ha militado en conjuntos modestos de Israel (Hapoel Eliat) y Grecia (Kolossos) e incluso protagonizó un paso fugaz por los Cavaliers jugando dos partidos. Al otro lado del Atlántico, ha sido utilizado como moneda de cambio entre cuatro franquicias: los Hornets, los Pelicans, los Rockets y los Kings.

efecto dominó Aunque el Baskonia se limitó ayer exclusivamente a informar sobre la contratación de Hopson, con fama de díscolo que militó durante varios meses de la pasada temporada en el Anadolu Efes hasta ser despedido por un acto de indisciplina -un viaje a Israel mientras estaba lesionado sin permiso del club cervecero-, no deberían demorarse una cascada de informaciones alrededor del definitivo puzle azulgrana. Básicamente todo dependerá del tiempo que se prolongue la recuperación de San Emeterio, al que aún le esperan dos semanas fuera de combate, y de la flexibilidad del Sidigas Avellino para liberar a Adam Hanga en una fecha anterior al 10 de mayo.

El húngaro, al que su club quiere retener hasta la conclusión de la Lega italiana, apunta a escudero de Causeur en el puesto de escolta. Como pareja de treses, Ibon Navarro dispondrá para el tramo decisivo de la competición del cántabro y del flamante fichaje Hopson. Un cuarteto, a priori, de muchas garantías con el que el Laboral Kutxa pretende elevar sobremanera la temperatura física a riesgo de perder en capacidad de lanzamiento desde la larga distancia. Haukur Palsson, el parche reclutado recientemente para paliar la orfandad exterior y que ya evidenció el pasado domingo sus carencias en el debut ante el CAI Zaragoza, carece de hueco y tiene visos de emigrar en breve cuando vayan cuadrando todas las piezas de este interminable rompecabezas.

Y es que, con independencia de las dificultades para el preparador vitoriana a la hora de ir ajustando a tantísima pieza nueva y readaptando sobre la marcha los roles de todos los integrantes, el Baskonia no renuncia a configurar la mejor plantilla posible para encarar con garantías las series finales por el título. Hopson, vigesimotercer jugador que debutará esta temporada con el inquilino del Buesa Arena, es la última baza para satisfacer dicho objetivo. Con el Anadolu Efes, el norteamericano alcanzó los 15 puntos y 4 rebotes por comparecencia en la Euroliga antes de su desvinculación.

Nombre. Brian Scott Hopson. Le apodan ‘Scotty’.

Lugar de nacimiento. Hopkinsville, Kentucky (Estados Unidos).

Edad. 25 años (8-8-1989).

Altura. 2,01 metros.

‘Draft’. No resultó elegido en el año 2011.

Trayectoria. Volunteers de la Universidad de Tennessee (2008-11), Kolossos (2011-12), Hapoel Eliat (12-13), Anadolu Efes, Cleveland Cavaliers y Canton Charge (13-14) y Sioux Falls Skyforce (14-15).

52

Fue la anotación que consiguió recientemente en la Liga de Desarrollo ante Reno Bighorns.