vitoria - El Baskonia le había puesto nombre y apellidos a su gran objetivo para ocupar la vacante dejada por el lesionado Davis Bertans, todavía pendiente de su intervención quirúrgica para saber el tiempo exacto que permanecerá de baja. Se trataba de un viejo conocido del Buesa Arena que ya ocupó una taquilla del vestuario durante los primeros meses de la temporada 2009-10, pero el club alavés acaba de quedarse finalmente con la miel en los labios. La tentativa de Josean Querejeta para incorporar a Vladimir Micov, alero del Galatasaray, no ha resultado exitosa y la búsqueda se mantiene abierta en un mercado comunitario huérfano de grandes gangas.

El fornido alero balcánico, de 2,03 metros y 29 años, es uno de los pocos baloncestistas de calidad que todavía sobrevive en el equipo de Estambul, incapaz de contener la masiva desbandada de sus mejores elementos en mitad de curso debido a los impagos por parte de un club inmerso en una delicada situación financiera. Micov, representado por el poderoso Misko Raznatovic -al igual que el técnico turco Ergin Ataman-, alberga la esperanza de que terminará cobrando las suculentas cantidades que todavía se le adeudan y, por ello, no tiene previsto abandonar un conjunto huérfano hoy en día de músculo económico que el pasado verano se llevó el gato al agua en dura competencia con el Real Madrid a la hora de adquirir sus servicios.

Además del letón Jannis Timma, quien desveló públicamente hace días que había rechazado una propuesta azulgrana hasta el final de la temporada, el Baskonia estudia en estos momentos diversos ofrecimientos que le han llegado para reforzar su cuerda exterior. Uno de ellos es el de Marko Keselj, un tirador serbio que milita en el Mega Vizura y con pasado en el baloncesto ACB. Sin embargo, no convence demasiado a Ibon Navarro. El refuerzo que incorpore el club en un breve plazo de tiempo no podrá vestirse de corto en la Euroliga.