Vitoria - Davis Bertans era hasta ayer un exterior en crisis y con la mirilla telescópica bastante desajustada. La puntual falta de acierto no le suele arredrar lo más mínimo, ya que siempre tiene la escopeta cargada por mucho que el aro se le haga diminuto. Aunque su muñeca no funcione a pleno rendimiento, posee alma de bombardero compulsivo. Por ello, no duda en seguir apretando el gatillo y rara vez se ve intimidado a la hora de hacer lo que mejor sabe: armar el brazo las veces que sean necesarias con el fin de recuperar su idilio con el aro. En los últimos tiempos, estaba preso de una ansiedad perniciosa que se traducía en deficientes porcentajes y, sobre todo, una mala selección de tiro. Pues bien, el espigado tres báltico ahuyentó frente al Barcelona todos los fantasmas que le atenazaban tras completar, posiblemente, su actuación más excelsa desde que viste los colores azulgranas.

Y es que el Baskonia encontró en San Emeterio y, sobre todo, Bertans a los estiletes perfectos para profanar la pusilánime defensa blaugrana, tiroteada desde todos los frentes. Mientras el cántabro condensó lo mejor de su repertorio en el tercer cuarto con 13 puntos, el letón fue paseando su munición durante diferentes tramos de la contienda. La segunda falta le envió de forma prematura al banquillo en el minuto 6 y hasta ese momento únicamente había dejado su sello con el triple que colocó el momentáneo 8-4 en el marcador. Ibon Navarro le devolvió a cancha mediado el segundo cuarto (31-26) y entonces inició su particular recital. De ahí al descanso, firmó dos nuevas dianas desde los 6,75 metros, además de otro dos más uno ante Thomas.

No obstante, Bertans acumuló una tercera personal que obligó al preparador vitoriano a resguardarle a la vuelta de los vestuarios en beneficio del veterano capitán. El ex del Partizan no hizo acto de presencia hasta el último cuarto, momento en que volvió a convertirse en una pesadilla para los exteriores de Xavi Pascual. Dos nuevos triples certificaron su particular pleno (5 de 5) y permitieron al Baskonia mantener en todo momento a raya a un Barcelona que careció de antídotos para minimizar su caudal ofensivo. Bertans mantuvo un intenso duelo de pistoleros con Abrines, al que los pívots visitantes trataron de liberar merced a contundentes bloqueos que al exterior azulgrana siempre le costó superar.

Fue, en definitiva, la ansiada rehabilitación de uno de los fichajes más ilusionantes emprendidos el pasado verano por Josean Querejeta para elevar la mordiente de un perímetro bajo sospecha por la orfandad de un killer. Intermitente, discontinuo y con una lectura del juego bastante mejorable que le lleva, por ejemplo, a postear con cuentagotas a sus pares más pequeños, Bertans está llamado a convertirse en una fuente de ingresos para el club en el futuro. Sus derechos en la NBA corresponden a los europeizados Spurs, una franquicia que puede sentarle como anillo al dedo por la ingente cantidad de jugadores procedentes de este lado del Atlántico con que cuenta Gregg Popovich. Antes de que esto suceda, Bertans debe terminar su proceso de maduración en Vitoria. Con actuaciones como la de ayer, su cotización subirá como la espuma.

El Barça, víctima predilecta. El exterior letón ya le endosó a los culés 24 puntos en el duelo inaugural de la presente temporada en el Palau Blaugrana. Ayer igualó su segunda mejor anotadora con 19 tantos.

Infalible desde el 6,75. Con los cinco triples conseguidos ayer, el letón ha mejorado su porcentaje hasta un 44%. Lleva convertidos 47 de 108 en el torneo doméstico.

El 103-94 de ayer viene a sumarse a las victorias sumadas en las temporadas 2010-11 (87-80), 2011-12 (71-60), 2012-13 (80-69) y 2013-14 (76-72). Los culés sí han ganado varias veces en el Buesa en la Supercopa, Copa y Euroliga.