VALENCIA Vives (11), Van Rossom (8), Sato (2), Harangody (15), Loncar (14) -quinteto titular-, Ribas (16), Nedovic (5), Lucic (7), Dubljevic (11), Rafa Martínez y Aguilar (9).
IBEROSTAR TENERIFE Uriz (3), Richotti (12), Beirán (2), Sikma (12), Sekulic (7) -quinteto titular-, Tsairelis (13), Heras (3), Blanco (18), Lampropoulos (2) y Rost (8).
Parciales 22-17, 18-20, 30-20 y 28-23.
Árbitros Cortés, Peruga y Aliaga. Sin eliminados.
Pabellón Fuente de San Luis ante 8.400 espectadores.
valencia - El Valencia firmó ayer una trabajada victoria ante el Tenerife en un encuentro en el que Vives y Ribas sacaron brillo en la segunda parte al rigor con el que jugó el conjunto valenciano, que sumó un triunfo que le acerca a la Copa a costa de las últimas opciones del equipo canario.
Tras resistir el asedio del equipo tinerfeño en la primera parte, los de Peras rompieron el choque tras el descanso con una agobiante defensa que dejó sin espacio a su rival, le permitió correr y le dio confianza para pulir sus ataques estáticos. En el arranque, el talento del escurridizo Richiotti y la buena labor de sus interiores cargando el rebote ofensivo permitió al Tenerife seguir el ritmo de un ordenado Valencia .
El equipo canario, con Heras supliendo con solvencia al lesionado San Miguel, supo escapar de la pegajosa defensa de los locales con buenos cortes hacia la canasta de sus jugadores sin balón que minaron la moral de los jugadores del Valencia.
Tras el descanso, Perasovic juntó en pista a Vives y a Ribas y el Valencia despegó. Viendo que se le escapaba el partido, el Tenerife se desubicó. Dos técnicas, una por protestar a su entrenador y otra por simular a Sikma, parecieron rematar al conjunto de Alejandro Martínez.
Pero el orgullo de Saúl Blanco y un par de contraataques evitaron que los visitantes se quedaran sin ninguna opción antes del último cuarto (70-57, m. 30) y tras superar ese mal momento se agarraron al partido con un par de triples de Rost sin importarle demasiado que su desventaja siguiera por encima de los diez puntos.
Viendo que el Tenerife no se desenganchaba del encuentro, Perasovic recuperó a la dupla Vives-Ribas para evitar sobresaltos. Lo logró, en parte también porque Lucic y Loncar mantuvieron el listón físico y dejaron sin opción de remontada a los visitantes. - Efe