Vitoria - Las alegrías y los éxitos no abundan precisamente en el seno del Baskonia en los últimos tiempos. Sin embargo, todas las dudas e inseguridades que destila el primer equipo en la Liga ACB dejan paso a un tornado de ilusión y esperanza a la hora de valorar las bondades de unos juniors que ayer dejaron bien claras sus intenciones de instalarse durante los próximos años en la elite. Si el presente azulgrana es de lo más incierto, el futuro puede ser fructífero si las promesas de su cantera que acaban de sellar un éxito de indudable calado en el Campeonato de España celebrado en Galicia ratifican su progresión.

Apenas unas horas después de que el Unicaja de Domas Sabonis le infligiera un severo correctivo (47-86) en semifinales, el Fundación 5+11 no acusó el golpe psicológico y se rehizo a lo grande para conseguir un meritorio bronce en la localidad de Marín. Un metal con sabor a oro por cómo se desarrolló un partido que parecía completamente perdido al descanso. La conmovedora fe exhibida por el equipo se vio premiada con una épica remontada (78-69) en la segunda mitad. Y es que los imberbes jugadores del combinado vitoriano, dirigido desde el banquillo por Dani Encinas, no se dieron por vencidos en ningún momento. Plantados en una providencial 2-3 para protegerse de las faltas, remontaron la friolera de 24 puntos con un protagonista destacado que acaparó todos los focos mediáticos.

Seguro que las agendas de los numerosos representantes y ojeadores presentes en tierras gallegas echaron humo ante la majestuosa exhibición de un lituano de 16 años. Tadas Sedekerskis, que recientemente tomó parte en Nueva York en el Jordan Brand Classic -campus que reúne a los mejores jugadores del mundo en categoría cadete-, asombró a los espectadores congregados en la pista de A Raña con una actuación descollante. El escolta báltico, de 2 metros de altura, firmó unos números de ensueño con 34 puntos (11 de 21 en tiros de campo), 10 rebotes y 7 faltas recibidas para un total de 35 de valoración. Le secundaron a la perfección otras dos perlas que vienen pegando fuerte como Carlos Martínez (14 puntos y 9 rebotes) y Rinalds Malmanis (18 puntos y 8 capturas). No jugó esta vez por lesion el ala-pívot brasileño Daniel Bordignon, otro de los diamantes por pulir en el que el Baskonia mantiene depositadas grandes esperanzas.

"Ha sido un premio al trabajo de todos estos años. Puede haber mimbres para el futuro, pero ahora llegan los años difíciles que dirán si estos chicos estarán arriba. Hay una tremenda laguna en la escala de formación de los jugadores", recordó ayer Juan Pedro Cazorla, responsable de la cantera azulgrana. El Real Madrid se proclamó campeón tras ganar en la final al Unicaja.