Vitoria. Su nombre es, sin duda, uno de los más habituales en las conversaciones que analizan la trayectoria del Baskonia desde que arrancó la temporada. Y, desgraciadamente, no por sus brillantes actuaciones precisamente. Leo Mainoldi lo sabe y no se esconce. Lejos de eso, prefiere coger el toro por los cuernos y reconocer abiertamente que todavía dispone de un amplio margen de mejora. Así, en una amplia entrevista concedida al blog Area 18, el cuatro azulgrana no tiene problemas en hablar abiertamente sobre esta situación. "Sé que a lo mejor no estoy jugando al nivel que sé que puedo jugar", asume.

Sin embargo, el argentino tiene muy claro cuál debe ser el camino para revertir este estado de cosas y conseguir desempeñar un papel más destacado en este proyecto baskonista. "Estoy tranquilo, tratando de adaptarme. Entreno cada día para mejorar y serle útil al equipo en los momentos en que me toca salir a la cancha. Creo que con trabajo y sacrificio, que es lo que siempre intento hacer, va a ir todo mejor", argumenta.

Y es que Mainoldi no oculta que el desembarco en un club grande con la exigencia permanente que ello conlleva y los cambios en cuanto a la aportación que de él se espera le está llevando a vivir un momento un tanto delicado. "Me estoy sintiendo diferente a años anteriores, con otro rol, e intento adaptarme a ello", destaca en la entrevista.

El pívot sudamericano también se refiere en estas declaraciones a la trayectoria general del equipo y a lo complicado que está resultando lograr el objetivo de lograr el pasaporte para la Copa del Rey de Málaga. "La verdad es que nuestra primera vuelta está siendo con muchos altibajos. No empezamos bien y por eso ahora llegamos a la última jornada sabiendo que tenemos que ganar en Fuenlabrada para entrar en la Copa. Para nosotros será una final y tenemos ganas de que llegue ese partido, aunque antes tenemos que jugar también otro muy importante contra el Olympiacos en la Euroliga", analiza.

La contienda que cierra la primera vuelta de la Liga para el Baskonia tendrá, además, unas connotaciones muy especiales para Mainoldi, ya que regresa a Fuenlabrada, donde ha militado las cinco últimas temporadas. "Va a ser un momento especial para mi, será muy emotivo volver. Fuenlabrada va a ser siempre mi casa, donde me han tratado de forma espectacular y eso lo voy a recordar siempre", concede.

Por último, el poste argentino no puede evitar pensar en el próximo Mundial que se disputará en España e ilusionarse con la posibilidad de defender la albiceleste en esa cita. "Siempre es un orgullo defender la camiseta de tu país, algo que no se compara con nada. El Mundial es un sueño pero falta mucho y para poder luchar por un puesto tengo que hacerlo bien en el Baskonia. Sólo pienso en eso".