vitoria. Salvo sorpresa morrocotuda, el Baskonia acabará segundo la fase regular de la ACB y dispondrá de la ventaja de campo hasta una hipotética final liguera. La meritoria victoria de ayer en el Palau Blaugrana le deja en una gustosa tierra de nadie que pocos auguraban cuando arrancó la competición. Sin grandes opciones de asaltar el sólido liderato de un Real Madrid prácticamente inabordable al que recibe el próximo domingo en el Buesa Arena con la intención de reducir su amplio colchón al frente de la clasificación ni tampoco de verse alcanzado por el nutrido vagón de equipos igualados en la tercera posición que ya precisan de un catalejo para observar a su predecesor en la clasificación.

El Barcelona disponía ayer de la última oportunidad para intentar dar caza a los alaveses, pero fracasó a la hora de instaurar algo de zozobra a una pelea ya descafeinada. Su derrota le mantiene igualado tanto con el Bilbao Basket como el Gran Canaria y le aleja ya a cinco victorias del objetivo cuando apenas restan once jornadas para que se inicien las series finales por el título.

El Caja Laboral, por tanto, se halla en una situación inmejorable para permitirse uno o incluso varios tropiezos a nivel doméstico y concentrar todas sus fuerzas en la Euroliga. Aquí, su situación es mucho más crítica y necesita dar el do de pecho para prolongar sus esperanzas de alcanzar los cuartos de final. El equipo azulgrana debe recibir en casa al Real Madrid, Lagun Aro, Valladolid, Manresa y Estudiantes. Fuera, actuará en las pistas del Joventut, Unicaja, Bilbao Basket, Fuenlabrada, Murcia y Canarias.