vitoria. Zan Tabak quiso que no se le comparara con Dusko Ivanovic desde el momento en el que fue presentado como nuevo entrenador del Caja Laboral. Sin embargo, comparte algunas cosas con su predecesor. El croata, como el montenegrino, afronta su trabajo con la máxima exigencia, por eso resta méritos a la más que aceptable trayectoria que ha seguido el equipo desde su llegada (7 victorias y 1 derrota) y se concentra en hacer hincapié en los aspectos que aún quedan por pulir para que el conjunto azulgrana ofrezca el nivel que el considera adecuado para competir por los títulos.
"A los entrenadores siempre nos juzgan por ganar y perder. Creo que el equipo ha mejorado un poco y hemos ganado partidos, pero no estoy satisfecho por cómo estamos jugando", aseveraba Tabak en la comparecencia que ofreció ayer en el Buesa Arena para analizar el duelo de esta tarde ante el Blancos de Rueda. "Estamos más tranquilos, se ha cumplido el objetivo de entrar al Top 16, pero sigo diciendo que estamos muy lejos de donde necesitamos estar si queremos hacer algo importante esta temporada", añadía el técnico croata, que echa en falta más tiempo para poder trabajar con el equipo, algo que le está impidiendo el frenético ritmo de partidos que le está tocando asumir.
"Como no puedes entrenar mucho, es muy difícil mejorar. Necesitamos más tiempo. Necesitamos mucha repetición para crear automatismos y no caer en los errores que cometemos", aseguraba
Tabak recela del partido de hoy, de un rival que está realizando una gran temporada y, más aún, de la respuesta y el hambre de sus pupilos. "Es un partido muy complicado. Sin importar a qué nivel estemos, seamos el mejor equipo de Europa o uno de LEB, siempre es un problema cuánto tiempo los jugadores pueden mantener hambre y tensión para seguir ganando. Se cansan de esfuerzo y concentración máximos. El reto es mantener la tensión", concluyó el técnico azulgrana.
