Vitoria. Zan Tabak ha satisfecho el primero de los objetivos por los que fue reclamado por el Baskonia para enderezar su maltrecho rumbo. Y, con el objetivo en la mano tras una demostración de poderío ante el Cedevita, el técnico croata no dudó en alabar la respuesta de unos jugadores que se han liberado tras el inicio de una nueva era en el banquillo. "Alguien me preguntó el primer día sobre si creía en esto y yo dije que sí. Aquí estamos. No ha sido bonito, pero el equipo ha reaccionado. Hicimos un gran esfuerzo mental y físico, el táctico y técnico todavía falta. Quiero dar las gracias al público por su apoyo. También lo pido para el futuro", fueron sus primeras palabras tras el arrollador 97-70.

Sin embargo, el balcánico desterró pronto los elogios y sacó su vena más inconformista al asegurar que a corto plazo aumentará su exigencia sobre el grupo. "Hay dos cosas donde debemos progresar: la importancia del partido y el ritmo de juego. Estamos intentando jugar distinto. Con el segundo quinteto, hemos conseguido lo que buscábamos. Queremos apretar en defensa, correr mucho más y que haya más posesiones. Sé que no será fácil, ya que hay unos hábitos adquiridos. No quiero decir que sean malos, pero es difícil cambiarlos en poco tiempo. A la gente le cuesta aceptar las cosas nuevas", confesó Tabak.

Tras reivindicar que el Baskonia "ha aprendido a sufrir y ha encontrado la capacidad para salir adelante", el preparador azulgrana lanzó una advertencia de cara al futuro. "Ahora viene otro tipo de trabajo, apretar más. Como la gente ya está más relajada, necesitamos trabajar más y castigar los fallos. Hasta ahora, no quería hundir a la gente", precisó categórico. Su filosofía está bien marcada y, por ello, vaticinó que en el futuro efectuará un reparto equitativo de los minutos entre todos los componentes. "Quiero jugar duro en defensa y apretar las líneas de pase. Así no se puede estar más de 20-25 minutos en pista. Toda la gente puede entrar y participar, pero siempre deberá aportar atrás. Esto es algo que a algunos jugadores les falta", avisó.

Tabak dio largas, por último, cuando se le cuestionó por la dureza del Top 16. "El siguiente paso es Bilbao. No tengo ni idea de los rivales. Siempre miro un paso adelante. El derbi será peligroso, ya que el equipo no ha aceptado todavía que debe jugar viernes y domingo".