Condición 'sine qua non'

El juego a tres bandas que arranca hoy para el Baskonia tendrá, como es ya conocido, al propio EA7 y al Cedevita como compañeros de reparto del cuadro alavés. Los croatas, con dos victorias, han de jugar aún contra el Anadolu Efes y Olympiacos en casa y viajar a Gasteiz en la última jornada. El Baskonia encarará su enfrentamiento ante los italianos sabiendo ya el resultado contra los turcos en un choque que arranca a las 18.30 horas. Aunque los nuevos pupilos de Aleksandar Petrovic ganaran sus dos encuentros previos, el Baskonia tendría la opción -en caso de que ellos también vencieran en todos sus cruces- de superar en Gasteiz el basketaverage entre ambos, de siete puntos, por lo que seguirían dependiendo de ellos mismos.

El que sí podría plantear problemas a pesar de que cayera en el Buesa Arena sería el EA7 Milano. Con tres victorias, un par más que los azulgrana a día de hoy, los de Sergio Scariolo aún podrían ganar sus dos partidos restantes -contra el Zalgiris en casa y Olympiacos en Atenas- y quedarse con la cuarta plaza, última que otorga el pase al Top 16.

En el supuesto, nada desdeñable, de que los tres equipos empataran a cuatro victorias, el Caja Laboral sería quien pasara a la siguiente fase. El basketaverage de los alaveses es el peor de los tres con -73 puntos por -63 de los croatas y -2 de los italianos pero el average que cuenta es el particular, no el general. Este factor ya expulsó el pasado curso al Baskonia de la Euroliga cuando, con el mejor promedio global, quedó por detrás del Cantú y del Gescrap Bizkaia ocupando la quinta plaza. De alcanzar estas cuatro victorias, el Baskonia debería ganar lo que resta, es decir al EA7 por segunda vez y al Cedevita, además de al Efes en Estambul. Por ello, el average con los italianos estaría superado, al haberle ganado los dos partidos, mientras que los serbios, al haber caído en los dos cruces con los de Scariolo se quedarían fuera de la terna. Es decir, el Baskonia sería el único con tres victorias.

Para hacer buenas estas cábalas, lo primero es lo primero y ganar a los italianos es condición sine qua non. Hay estadísticas a favor y en contra para augurar el resultado. Por un lado, el Baskonia siempre ha ganado al equipo milanés, contra el que se ha enfrentado tres veces, en Euroliga. Todas, además, con suficiencia. Por otro, el club alavés no ha ganado todavía ningún partido en el Buesa Arena en la presente Euroliga. Para desnivelar la balanza, y haciendo un ejercicio de parcialidad, los italianos son el único equipo que ha sido batido por los alaveses este curso en Europa. Todo ello no son más que estadísticas, pero si nos fijamos en el estado de forma de los pupilos de Scariolo vemos a un equipo que, parece, está recobrando la estima. Lleva dos victorias consecutivas en el Pallacanestro y una, contra el Cedevita, en Europa, habiendo perdido su último encuentro en Estambul, una de las canchas más difíciles del grupo.

A todo ello hay que sumar el excelso estado de forma de Keith Langford, uno de los puntales del equipo lombardo que anotó treinta puntos en liga la pasada jornada. Cierto es que es que fichajes a los que se les suponía un protagonismo mayor no están dando lo que de ellos se esperaba como es el caso de Omar Cook o Richard Hendrix, habitual de la rumorología baskonista. Pero la plantilla italiana tiene recursos de sobra como para no acusar su moderado rendimiento.

Aparte de Langford, Bourousis lleva la voz cantante sobre el parqué en el equipo blanquirrojo. 14,8 puntos y 8,2 rebotes por los 16,1 puntos, 3 rebotes y 2,9 asistencias que firma Langford. Hairston Malik les secunda en el apartado estadístico con 13,6 puntos, 2,4 rebotes y 2,1 asistencias. Omar Cook, quien pese a no generar demasiado juego está con 6,4 puntos y 5,9 asistencias y Fotsis, 7,9 puntos y 4,9 rebotes, apoyan a los puntales del equipo amén de los Basile, Melli o Gentile. Un duro reto que puede generar esperanza o sepultar de un plumazo buena parte de las que se habían depositado en este Baskonia 2012-13.