Vitoria. La Asamblea General de la ACB dio al fin ayer el visto bueno a la propuesta que llevaba varias semanas sobre la mesa y que ratificaba el acuerdo -a la baja, eso sí- con Televisión Española y la Forta para la retransmisión de los partidos de la temporada que arranca en apenas dos semanas. Los clubes aprobaron por unanimidad la única oferta firme que se les presentó, la que defendía el director general de la asociación, Albert Agustí, y que supone que cada semana el ente público garantiza la emisión de dos encuentros en directo, uno de ellos en su primer canal, lo que representa la principla novedad con respecto a la situación que se registró en campañas precedentes.

La discutible gestión de la ACB había limitado mucho su margen de maniobra. Los ingresos por el contrato televisivo decrecen de manera exponencial, aunque en el acuerdo con TVE se trata de buscar notoriedad y por eso los rectores de la asociación han empujado tanto para que el baloncesto pudiera tener presencia en la primera cadena, que acogerá el mejor partido de cada jornada los domingos por la tarde, en principio a las 19.00 horas. Teniendo en cuenta factores como el nuevo calendario de la Euroliga, con todos los partidos fijados para jueves y viernes, y en menor medida los horarios de los encuentros de fútbol de los equipos con mayor tirón, se ha definido este horario como el que podría ofrecer mejores registros de audiencia.

La ACB busca, casi con más ahínco que la propia operadora televisiva que ostentará sus derechos, recuperar la relevancia perdida. El año pasado ya se realizó el experimento de trasladar la final liguera a la primera cadena y los registros de audiencia resultaron prometedores. Claro que los dos equipos que estaban implicados, Real Madrid y Barcelona, pasan por ser los dos con más tirón. En cualquier caso, el baloncesto busca desprenderse con el acuerdo de su papel residual.

Del espectáculo que genere y de los datos que arroje dependerá en gran medida su futuro. Y a pesar de que el acuerdo defendido por Agustí parece, pese a la merma evidente de unos ingresos que se reducen prácticamente a lo que abona el ente público por la retransmisión de la Copa del Rey, no es oro todo lo que reluce. La televisión púiblica, no en vano, se reserva el derecho a desplazar de nuevo ese partido estelar a Teledeporte en el caso de que los datos de audiencia no resulten suficientemente convincentes a sus directivos.

El canal temático ofrecerá un segundo partido todas las semanas, aunque en este caso se prevé que será a las 18.00 horas. Para las autonómicas, aunque muchas se bajan de carro del baloncesto por la falta de fondos (EITB en principio seguirá) queda la franja de los domingos a mediodía.