Vitoria. El Baskonia trabaja para que los jóvenes de su cantera se fogueen en otros lugares de cara a su futuro ingreso en la primera plantilla, algo que en los últimos tiempos se está resistiendo más de la cuenta. Con el fin de que disputen la mayor cantidad de minutos posible, la entidad vitoriana ya ha decidido que Bordignon, Gacic, Malmanis, Carlos Martínez y Ndongala -todos ellos de la generación del 95 y 96- militen a partir de esta temporada en las filas del UPV Álava, que volverá a tomar parte en Liga EBA a los mandos de José Luis Ortun.

Sin embargo, el mayor foco de preocupación estriba en estos instantes en el futuro de Ilimane Diop, posiblemente el jugador en el que más confianza han depositado las altas esferas para llenar de dinero las arcas con un futuro traspaso a la NBA, donde varias franquicias ya le siguen el rastro. Tras un verano cargado de compromisos internacionales con la selección española, el poste de origen senegalés -de 2,10 metros de altura y una envergadura si cabe mayor- ha acabado con su rodilla hecha pedazos. Sus molestias han derivado, a la postre, en una osteocondritis que le mantendrá de baja durante los dos próximos meses. Este percance ha paralizado, de momento, su cesión al Araberri, que se frotaba las manos para contar con sus servicios de cara a su nueva andadura en la Adecco Oro. Antes de tomar una decisión definitiva, el Baskonia quiere comprobar que su recuperación marcha por el buen camino.