Vitoria. Regresó a Vitoria cuando pocos lo creían posible y muchos se negaban a creerlo. Fue recibido con pitos en su presentación oficial y se mantuvo en la nómina de los malditos para cierto sector de la afición durante algún tiempo. Es más, todavía hay quien no le ha perdonado ciertas salidas de tono. Pero sobre lo que no existe división de opiniones es sobre su grandeza y sobre la importancia de su presencia en una plantilla en la que se echan en falta jugadores con un carácter visceral e indomable como el de Pablo Prigioni, un tipo que continúa empeñado en hacerse un nombre para la posteridad en el baloncesto.
El timonel del conjunto azulgrana se ha convertido en el jugador extranjero que más partidos ha disputado en la historia de la ACB. Desde que recaló en la competición española a finales del pasado siglo, en la temporada 1999-2000, para enrolarse en las filas del Jabones Pardo Fuenlabrada, su primer equipo, Prigioni ha disputado la friolera de 435 encuentros. El base argentino batió el anterior mejor registro, que descansaba en manos del mítico Granger Hall (Magia de Hueca), con 433, en el encuentro que disputó con el Caja Laboral en el Olímpico de Badalona. El sábado, en el duelo que significaba la despedida del exilio temporal en el Iradier Arena, el jugador nacido en Río Tercero confirmó la marca y cosechó un nuevo logro en una temporada en la que ya se había convertido en un referente histórico también de la Euroliga.
Nadie en la historia de la máxima competición continental ha logrado recuperar más balones que Prigioni, que a lo largo del presente curso superó a otro ladrón legendario como Teo Papaloukas. El jugador del Caja Laboral acumula 320 robos, por los 319 que jalonan el historial del combo heleno. Sin embargo, este registro peligra, toda vez que el Maccabi sigue adelante en la competición y el Caja Laboral naufragó con estrépito en la primera fase y ya está fuera.
En lo que se refiere al número de partidos disputados en la ACB, ahora denominada Liga Endesa, la cosa cambia. Prigioni, si las lesiones le respetan, puede seguir abriendo brecha con el resto de jugadores foráneos que se han forjado un nombre con el paso de los años. Al margen del argentino y sus 435 partidos y de Hall (433), el podio lo completa el eterno Bernard Hopkins (432). Entre los 50 primeros -en un listado que cierra Epi (422)- todavía hay un cuarto jugador extranjero, también argentino en este caso, como Pancho Jasen (428).
Prigioni, que tiene margen para superar a alguno de los que le preceden, ocupa la plaza número 42 en una lista que comandan Rafa Jofresa (756), Nacho Rodríguez (737) y Nacho Azofra (705), otros tres directores de juego. Entre los jugadores en activo, sólo hay cinco que hayan jugado más encuentros que el base baskonista: Carlos Jiménez (615), Navarro (491), Felipe Reyes (482), Berni (453) y Mumbrú (452).