barcelona. Zeljko Obradovic se encuentra a un paso de tener él solo más títulos europeos que la mayoría de los equipos en toda su historia. El entrenador del Panathinaikos guió ayer de nuevo a su equipo hacia la que puede ser la octava Euroliga del preparador serbio.

El Panathinaikos peleará por su sexto título tras imponerse ayer a un Montepaschi que, aunque lo intentó con ahínco, fue incapaz de controlar el partido y acabó cediendo ante los 17 puntos de Calathes y los 14 de Fotsis pero, sobre todo, la batuta de un Dimitrios Diamantidis que acabó con 8 puntos y 9 asistencias. Aunque los hombres de Simone Pianigiani, con Lavrinovic y Kaukenas como líderes, empezaron muy bien y pusieron contra las cuerdas a los helenos durante buena parte de la primera mitad, llegando a tener una renta máxima de siete puntos al inicio del segundo cuarto, el conjunto griego recuperó al mejor Batiste en la pintura para, paulatinamente, ir enterrando las opciones de éxito de los transalpinos.