REAL MADRID Tucker (7), Suárez (8), Reyes (15), Tomic (9) -cinco inicial-; Prigioni (6), Begic (6), Fischer (2), Mirotic (2), Velickovic y Vidal.

GRAN CANARIA Green (9), Carroll (20), Beirán (3), Wallace (12), Rey (5) -cinco inicial-; Bellás (4), Moran (8), Bramos (6), Nelson (3) y Borovnjak (3).

Parciales 14-20, 21-24, 17-13, 22-16.

Árbitros García Ortiz, Guirao y Sacristán. Eliminaron al visitante Wallace (min.40).

Pabellón Caja Mágica (6.139 espectadores).

madrid. El Real Madrid pudo darle una alegría a sus aficionados (74-73) ante el Gran Canaria en el partido que abrió la vigésimo séptima jornada de la Liga ACB, y que permite a los madridistas coger moral de cara a los decisivos encuentros que le esperan en Valencia. Sin embargo, lo hizo con polémica y una clara ayuda arbitral en los últimos segundos después de que, con 74-73 en el marcador, los colegiados obviasen una clarísima falta de Felipe Reyes, cuyo manotazo a Nelson quedó sin sanción cuando penetraba a canasta para intentar dar a los suyos los dos puntos de la victoria.

El ambiente, más gélido de lo habitual, motivó que el conjunto insular aprovechase su mayor frescura física para imponer un ritmo de juego más vivo y rápido ante un Madrid que se mostró cansado y con la cabeza pensando más en los partidos de cuartos de final de la Euroliga que quedan por jugarse en la Fonteta de San Luis. Llull y la manita arbitral le sacaron del atolladero.