vitoria. Las obras de reforma del Buesa Arena arrancaron el pasado lunes, pero durante estos días los socios del Baskonia no han sufrido por el momento los inconvenientes de una obra de semejantes características. Aunque los andamios empiezan a rodear ya al pabellón de Zurbano, no será hasta el viernes cuando comience el derribo de los actuales accesos, lo que obligará a los seguidores del conjunto vitoriano a acceder al interior del Buesa a través de siete pasarelas levantadas para la ocasión a partir del próximo partido de Liga, el domingo 3 de abril frente al Estudiantes.

Los socios deberán utilizar la pasarela -de tres metros de ancho y 35 de largo- más cercana a su torre habitual, identificada con el mismo número. Ayer, además de informar sobre los detalles del proyecto de ampliación adelantado hace meses por DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, desde la Diputación solicitaron a los aficionados del equipo que, a partir de ahora, hagan uso del transporte público para acercarse a ver los partidos del cuadro azulgrana o, en su defecto, compartan los vehículos. En principio, el aparcamiento perderá alrededor de doscientas plazas, aunque la ubicación de las mismas variará durante los próximos quince meses, tiempo estipulado para la ampliación.

Cada quince días los encargados del proyecto de reforma informarán a los seguidores del Baskonia sobre los contratiempos con los que se toparán hasta que, finalizada la presente campaña, los operarios -alrededor de 180- abandonen el trabajo en el exterior para trabajar en el cambio de la estructura superior. Será entonces cuando se procederá a la extracción de la cúpula para depositarla en un nuevo espacio situado junto al Buesa que servirá de aparcamiento y recinto cobijado para albergar distintos actos. El traslado de la cubierta supondrá un gasto de 463.199 euros y se acometerá mediante dos grandes grúas. En enero de 2012 el pabellón podrá albergar a 9.000 espectadores, pero no será hasta junio del mismo año cuando se inaugure con 15.290 asientos.