fuenlabrada. El sopapo que el Baskonia recibió ayer en Fuenlabrada fue de los que hacen daño. Con un imperdonable parcial de 34-7 en el tercer cuarto, la escuadra vitoriana completó los que bien podrían calificarse como sus diez peores minutos de juego en los últimos años, si no los peores.
Cuando Dusko Ivanovic apareció por la sala de prensa del Fernando Martín todos esperaban unas duras palabras del montenegrino con sus jugadores. Sin embargo, el entrenador baskonista acostumbra siempre a ser especialmente duro con sus pupilos en las victorias y magnánimo en las derrotas, y ayer así lo demostró. "Lo que nos ha pasado es inexplicable y nos pasa muchos partidos que jugamos fuera. Cuando un equipo juega duro nos paramos y nos precipitamos cuando nos cogen ventaja. No hemos tenido tranquilidad", se limitó a explicar Ivanovic antes de regresar a la capital alavesa.
"El Fuenlabrada ha jugado mejor que nosotros y ha tenido intensidad, ambición y dureza. No hemos sido capaces de pararlos", lamentó el preparador balcánico antes de asumir que ninguno de los jugadores de al escuadra azulgrana tuvo ayer "la cabeza fría" a la hora de defender las acometidas del equipo dirigido por Salva Maldonado ni la "paciencia" necesaria para atacar con sapiencia a los Ayón, Rabaseda y compañía. Con Pape Sow convaleciente de su lesión pulmonar, Ivanovic tuvo que conceder minutos a hombres como Nemanja Bjelica para reforzar la pintura. Ni un Esteban Batista que regresaba a la que fue su casa -el uruguayo acabó con valoración negativa en sus 13 minutos de juego- ni Stanko Barac fueron capaces de frenar al mexicano Gustavo Ayón.
"por todos los lados" Por su parte, Pau Ribas y Fernando San Emeterio no pusieron demasiadas pegas al inesperado varapalo vivido en tierras madrileñas. "Esta derrota nos pone los pies en el suelo de cara a los compromisos tan importantes que nos quedan", aseveró el exterior catalán tras admitir que el Caja Laboral fue ayer incapaz de leer acertadamente el juego de los fuenlabreños. "En la primera parte hemos estado acertados, con un buen inicio, pero luego ellos han salido muy agresivos en defensa y nos han anotado por todos lados. No hemos sabido reaccionar", criticó uno de los pocos hombres que ayer se salvaron mínimamente de una actuación general horrible en todo el bando baskonista.
Finalmente, Fernando San Emeterio recordó que lo ocurrido ayer en el Fernando Martín no fue muy diferente a encuentros fuera del Buesa Arena como el disputado ante el Meridiano Alicante o el más reciente contra el Blancos de Rueda Valladolid. "En el tercer cuarto nos han dado un auténtico baño. Cuando encadenamos varios errores cada uno, por coraje, queremos solucionar las cosas por nuestra cuenta en ataque y hacemos muchos errores", aseveró el alero cántabro, uno de los pocos baskonistas que tenía ganas de hablar antes de coger el autobús de vuelta a Vitoria.